Las organizaciones sociales y populares de izquierda, nucleadas en la Unidad Piquetera (UP) testearán hoy, por primera vez, la rigurosidad que el nuevo Gobierno argentino intenta transmitir cuando se refiere a la protesta y piquetes en las calles.
Miles de personas se manifestarán hoy en Argentina, con Ciudad de Buenos Aires como evidente epicentro del descontento tras las últimas medidas aplicadas y las que se anunciaron para el futuro.
No es casual que sea hoy 20 de diciembre, cuando se cumple un nuevo aniversario del estallido social de 2001.
Será la primera vez que las organizaciones sociales que ganaron protagonismo en los últimos lustros pongan a prueba la paciencia y profundidad del protocolo anunciado por la ministra Patricia Bullrich.
Esperar a que las manifestaciones se limiten a las veredas sin tocar las calles, complicando el tránsito, tal lo indicado como punto de quiebre para evitar la intervención de las fuerzas de seguridad, suena a ingenuidad.