La noche del 31 de julio de 1944, en Córcega, Antoine de Saint-Exupéry, autor de la popular obra de literatura infantil “El Principito”, era visto por última vez, antes de despegar de una base aérea en un avión P-38 y más tarde desaparecer.
Su muerte permaneció como un misterio durante muchos años, hasta que los restos del escritor y aviador francés fueron hallados recién en el año 2000, junto con un brazalete en el que estaba inscripto su nombre y el de su esposa.
Su novela “El Principito” fue publicada en 1943. Con 140 millones de copias vendidas, la obra se convirtió en uno de los libros de mayor venta de la historia. Se ha traducido a más de 250 lenguas, más que cualquier otro libro en francés.
Más allá de ser recordado como escritor, durante la Segunda Guerra Mundial luchó con la aviación francesa en misiones peligrosas. Sus experiencias como piloto fueron a menudo su fuente de inspiración.