En el día de ayer, fracasó el planteo de Juntos por el Cambio para derogar la ley de Alquileres a nivel nacional. En este sentido, el presidente de la Asociación Misionera de Inquilinos aseguró que no hubiese cambiado para bien la situación, ya que en el caso de que se hubiera dado, “se hubiese prestado para una mayor especulación y una mayor incertidumbre de la que ya tenemos y hubiese repercutido directamente en el mercado” señaló Torres.
A partir del mes de agosto se volvería a tratar la problemática en Cámara de Diputados, para buscar una solución conveniente. Son bajas las expectativas del sector, sobre todo para los inquilinos que siguen teniendo inconvenientes a la hora de conseguir un lugar para vivir.
Sobre esto último, Torre expresó: “Hay expectativas si se hacen los ajustes y correcciones de lo que uno está pidiendo como, por ejemplo, tener en cuenta algunas cuestiones que escaparon de la ley, como un organismo regulador que pueda fiscalizar el cumplimento de las normativas que existan de ahora en adelante, una actualización de precios acorde al salario del inquilino y no a un promedio inflacionario. Si no se corrigen esas variables la situación sería más de lo mismo”.
En este contexto, el dirigente de la asociación sostuvo que los que más pierden son los inquilinos: “En esta situación la parte más débil de la ecuación y obviamente por necesidad, es la del inquilino, lo cual no quiere decir que en las expectativas de ganancias no pierda el locatario. Sabemos que la inflación supera cualquier aumento posible que puedan hacer, pero la verdad es que en realidad el que pierde más por la necesidad imperiosa de vivir o de alquilar en algún lugar es el inquilino, porque además el locatario encuentra otras salidas como el alquiler temporario”, expuso.
Muchos inquilinos actualmente se encuentran en una situación desesperante para resolver su situación respecto de las viviendas de alquiler, ya que además, tampoco existe un subsidio por parte del estado para poder garantizar su equilibrio económico.
“Se vieron préstamos, abandono de contrato, volvieron a la casa de los progenitores, cooperativismo de familias viviendo en conjunto que hacen a los problemas de los inquilinos por no poder afrontar los gastos”, contó Torres sobre algunas de las situaciones que conoce a diario.
En cuanto a la situación de los locatarios se da mucha informalidad “la primera es el alquiler temporario porque no existe, está fuera del margen de la ley, esa es la que más abunda porque es la que más le conviene a los propietarios”.
Piden por un organismo regulador
Desde el sector, uno de los pedidos más recurrentes es la conformación de un organismo regulador para esta normativa. “Si no hay un organismo que controle esto y queda liberado a la azar, el mercado negro va a seguir proliferando y eso es lo que tiene que terminar. Es una actividad económica que tiene que estar regulada”.
Por último, en la ciudad de Posadas, Torres apuntó sobre los organismo locales y dijo que no realizan los controles correspondientes en las diferentes obras debido a que los mismos podrían afectar al mercado: “El departamento de infraestructura de obras y servicios públicos no hace controles en las construcciones. Si ellos hacen los controles tienen que clausurar muchas obras lo cual hace que la demanda aún sea mayor. Todo es un descalabro. Están imposibilitados en su rol de policía de hábitat porque tendrían que clausurar media ciudad”, cerró.