En Argentina, el cáncer de riñón se encuentra entre los cinco cánceres más comunes tanto en varones como en mujeres. Según la Agencia Internacional de Investigación sobre Cáncer (IARC) el número de nuevos casos en 2020 fue de 5.093, y según las proyecciones de Globocan (Global Cancer Observatory), para el año 2030 esta cifra aumentará a más de 6.100, casi un 20% más que los registrados en 2020.
El cáncer de riñón, también conocido como carcinoma de células renales, se origina a partir de la proliferación descontrolada de las células que forman el riñón y no presenta síntomas en sus etapas iniciales.
Aunque en etapas iniciales por lo general la enfermedad no causa ningún signo o síntoma, los tumores más grandes sí pueden presentarlos y hay que prestarles atención y consultar al médico. Estos son:
• Sangre en la orina • Dolor en un lado de la espalda baja • Cansancio • Pérdida del apetito • Fiebre • Anemia
“El cáncer de riñón es un tumor que no presenta síntomas en estadios tempranos. Poner sobre la mesa este cáncer para desmitificar, informar y concientizar es vital en tiempos donde la investigación, la prevención y los tratamientos han avanzado muchísimo. La detección temprana a través de la educación al paciente, informándoles sobre los factores de riesgo y los síntomas que pueden llegar a tener, para movilizarlos a una rápida consulta al médico, son clave en esta enfermedad. La detección temprana es fundamental para el éxito de los tratamientos”, expresó el doctor Rubén Kowalyszyn, oncólogo clínico miembro de la Asociación Argentina de Oncología Clínica (AAOC).
Si bien el cáncer de riñón es mayoritariamente esporádico, los siguientes factores pueden elevar el riesgo que tiene una persona de desarrollarlo:
Tabaquismo: Fumar tabaco duplica el riesgo de desarrollar cáncer de riñón. Se considera que causa alrededor del 30 % de los cánceres de riñón en los hombres y aproximadamente el 25 % en las mujeres.
Género:Los hombres tienen de dos a tres veces más posibilidades que las mujeres de desarrollar cáncer de riñón.
Edad:El cáncer de riñón se observa típicamente en adultos y se suele diagnosticar entre los 50 y los 70 años.
Obesidad: Las personas con sobrepeso tienen un mayor riesgo de padecer carcinoma de células renales.
Presión arterial alta: Los hombres con presión arterial alta, también llamada hipertensión, pueden ser más propensos a desarrollar cáncer de riñón.
Exposición al cadmio.
Enfermedad renal crónica: Las personas cuya función renal se encuentra disminuida, pueden correr un riesgo mayor de desarrollar cáncer de riñón.
Diálisis a largo plazo: Las personas que se encuentran realizando diálisis durante un período prolongado tienen más riesgo de desarrollar tumores malignos en los riñones.
Antecedentes familiares de cáncer de riñón: Las personas que tienen familiares de primer grado con cáncer de riñón, como padres, hermanos o hijos, tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.