Docentes del Frente de Trabajadores de la Educación en Lucha (FTEL) interrumpieron el acceso al Puente San Roque González de Santa Cruz para expresar su malestar con el gobierno provincial por el acuerdo salarial firmado que está por debajo de la inflación.
“Por ahora el corte acaba de comenzar y seguro va a transcurrir dos o tres horas hasta decidir si levantamos o si seguimos, la asamblea va a decidir”, explicó Mónica Gurina, la dirigente de ATE y CTA A en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones.
Además, aseguró que no hubo convocatoria a dialogo, “lo más grave de todo es que si le preguntas a cualquier docente y quieren volver a sus grados, pero tampoco vamos a resignar nuestros sueños en post de un ajuste que nada tenemos que ver”, agregó.
Esta medida anticipa lo que va a suceder la semana que viene, en el fin de semana largo, donde prevén cortar el acceso a las Cataratas del Iguazú, en pleno fin de semana patriótico extralargo.
Cabe recordar que ayer el FTEL volvió a salir a las calles para exponer el malestar del sector por el acuerdo salarial por debajo de la inflación firmado por los otros gremios docentes con el Gobierno provincial. Los docentes se concentraron frente a Casa de Gobierno y pasadas las 10 de la mañana marcharon hacia la Legislatura provincial donde ingresaron luego de varios minutos de forcejeos y tensión con el personal de seguridad, para entregar un petitorio.
Los manifestantes permanecieron más de seis horas adentro de la Legislatura hasta que finalmente recibieron su petitorio y se retiraron. Para ello, fue necesaria la intervención del juez de instrucción Juan Manuel Montes quien se acercó para hablar con los docentes sobre sus reclamos y la razón por la que están en la Legislatura. El magistrado se ofreció a buscar un interlocutor válido dentro de la Legislatura para que los docentes pudieran dejar su petitorio.
El twitt engañoso de Sedoff
Que el Gobierno haya firmado esta semana con los gremios docentes que integran la Mesa de Diálogo (salvo el SEMAB, que no acordó), empeoró el malestar. Es que esos gremios aceptaron llevar el básico de 41.000 a 43.400 en mayo y a 44.400 pesos en junio.
El intento del ministro de Educación, Miguel Sedoff, de convencer a través de sus redes que el aumento otorgado a los docentes misioneros supera la inflación de enero a mayo es vergonzoso. En primer lugar, Sedoff publicó que la inflación acumulada de enero a mayo es del 32% pero se olvidó de incluir la inflación proyectada de mayo.
Según el INDEC, los primeros cuatro meses del año acumularon 32% de inflación, a lo que hay que sumar los 8,5 a 9% proyectados de mayo. Es decir que, en el mejor de los casos, la inflación enero-mayo será de 40,5%.
En sus redes, Sedoff asegura que el aumento salarial docente de enero a mayo fue de 39,54% pero llega a ese porcentaje promediando lo que cobran todos los docentes, desde el que recién comienza que ganará en mayo 660 pesos más que los 130.000 pesos que cobró en marzo, hasta el supervisor con 25 años de antigüedad que percibe un sueldo superior de 600.000 pesos. Este cálculo salarial promedio se pretende imponer desde hace muchos años en la provincia, en contra de la referencia que se usa en cualquier discusión paritaria, el llamado “cargo testigo”, que es el del maestro sin antigüedad.
Para el cargo testigo, el aumento salarial de enero a mayo fue de 35,56%. Claramente, ante el 40% de inflación de ese período, los trabajadores perdieron salario.
“El acuerdo con los gremios amigos es miserable porque sabemos que la inflación de este mes rondará los dos dígitos, por lo que el 4% que se acordó para mayo y 2% para junio es miserable”, indicó uno de los docentes de Leandro N. Alem que ayer participó de la marcha provincial, Javier Smitch.
“La situación es muy preocupante, sabemos que el combustible volverá a subir en agosto y que en Misiones sube más que el resto del país. Además, la inflación en la canasta de alimentos es más alta que en el resto de los productos y servicios, por lo que es mayor el impacto en las familias de menor ingreso”, agregó.
Otro de los educadores consultados destacó que el reclamo docente va más allá del salario, “nos faltan insumos en las escuelas, el año pasado sólo nos entregaron las libretas para el primer ciclo y este año hicieron lo mismo. Algunas escuelas no tienen tizas ni borradores”.
Sesenta pesos por alumno
Por su parte, el secretario general de la Unión de Trabajadores de la Educación de Misiones (UTEM), Leandro Sánchez, cuestionó la inversión del Estado por alumno en comedores escolares, “mandan 60 pesos por alumno para que desayunen y almuercen en las escuelas de jornada completa y entre 20 y 25 pesos para la copa de leche con pan que sirven las escuelas de jornada simple. Los números hablan por sí solos, el monto es absolutamente insuficiente”.
Consultado sobre el acuerdo salarial, el dirigente se preguntó a qué sectores representan los gremios que firmaron “un aumento a la baja donde los docentes pierden frente a la inflación y que encima, lo presentaron como un gran triunfo”.
Pese al clima de tensión, Sánchez expresó su deseo de que el Gobierno los convoque a negociar un salario docente en el que los trabajadores no pierdan frente a la inflación.
