Las familias que forman parte de la aldea mbya Tapé Mirĩ, ubicada en Garuhapé , vienen hace varios meses solicitando a la Municipalidad la apertura de un camino de acceso a la comunidad desde la ruta 220. La necesidad radica en que los chicos deben recorrer siete kilómetros a pie para ir a la escuela y, además, se les dificulta poder traer mercadería, médicos y salir con rapidez si se les presenta alguna emergencia médica que ponga en riesgo la vida de alguno de ellos.
“Solicitamos al municipio que nos mande la máquina para poder abrir el camino. Hay un camino antiguo pero falta que pase la máquina para que arregle y de esa forma puedan entrar vehículos hasta la comunidad”, señaló a PRIMERA EDICIÓN, el cacique de la comunidad mbya, Hilario Moreira.
Actualmente, son 42 las personas que se encuentran asentadas allí y son 18 los chicos que van a la escuela en la colonia, cuatro de ellos a la primaria y catorce a la secundaria, en el turno mañana y tarde.
Por el momento, los niños y adolescentes van a la escuela por un camino que corresponde a un terreno privado de un vecino que tiene ganado, lo que también representa un peligro. Hace unos días, uno de los niños terminó con una lesión en su cabeza al caerse sobre una roca por huir de una vaca que estaba con su cría.
El cacique comentó que con la apertura del camino no se acortan las distancias, pero sí se habilitará el paso de vehículos. “Queremos mandar a nuestra gurisada en un vehículo a la escuela, son chicos muy chiquitos que tienen que caminar todos esos kilómetros”, precisó Moreira.
Además de prevenir cualquier accidente con el ganado en ese terreno del vecino, también se evitan mordeduras de serpientes y que los chicos pasen frío en época invernal. “Para nosotros es imprescindible ese camino”, resaltó el cacique.
La comunidad presentó una nota al municipio dirigida al intendente Gerardo Schmit, pidiendo por la apertura de esta vía, pero hasta el momento solo recibieron negativas.
“Le presentamos al municipio los papeles de la tierra y que nos íbamos a asentar ahí, nos dijeron que sí. Le pedimos el camión de la Municipalidad para la mudanza, no hubo caso, entonces la pagamos. Cuando le pedimos que abra el camino, nos dijeron que sí, pero hasta ahora no hay respuesta favorable”.
Y agregó: “En la Municipalidad primero nos dijeron que estaban de vacaciones, después que estaban rotas las máquinas y ahora nos dicen que pidamos vales de nafta a la Dirección de Asuntos Guaraníes para la máquina. Ponen excusas para no hacer el camino”.
El cacique resaltó que solamente necesitan la apertura del camino, en cuanto a lo demás se arreglarán ellos mismos. Comentó además que tiene un amigo taxista que es quien se hará cargo del traslado de los chicos a la escuela, así como de llevarlos al pueblo a hacer la compra de mercadería cuando lo necesiten.