Se acerca el 8 de diciembre, el Día de la Inmaculada Concepción de María, fecha que convoca y moviliza a muchos misioneros que año tras año se organizan y hacen el viaje en bicicleta hacia la Basílica de Itatí en Corrientes, donde rinden homenaje a la madre de Jesucristo.
Por esa devoción y la fe en la Virgen, el grupo Los Amigos del Pupitre, formado por unos 25 integrantes de esta localidad llevan 22 años realizando la travesía en bicicleta y hace diez años que sus esposas se organizaron y los acompañan dándoles asistencia en el camino. Se nombraron “Las Matecocideras”.
Verónica Amado es la esposa de Daniel Báez, uno de los organizadores y peregrino desde hace 22 años. Amado contó a PRIMERA EDICIÓN que “cuando comenzó el grupo de amigos con las peregrinaciones en bicicleta a Itatí nosotras nos quedábamos, ahora hace unos diez años, con los chicos más grandes ya, nos unimos a la travesía como apoyo en las paradas. Nos organizamos y durante todo el año trabajamos vendiendo pollos, pastelitos, alfajores haciendo actividades para juntar dinero para comprar las cosas que llevamos para esos tres días”.
Además agregó: “también recibimos donaciones, dos panaderías nos donan el pan que servimos con el mate cocido, también nos donan yerba para prepararlo y los vasitos también nos donan, golosinas, este año tenemos 12 cajones de naranjas, que pelamos todas las naranjas para llevar listas para consumir y cuatro cajones de bananas. Estamos bien armaditas, somos ocho y nos pusimos el nombre de “Matecocideras”.
“Este año salimos el martes 6 a la madrugada con peregrinos en bicicleta y hay diferentes paradas y ahí estamos nosotras para proveerles de mate cocido, frutas, agua, todo para darles asistencia”, contó Amado.
También dijo que en los autos que ellas viajan también llevan bidones con agua y hielo, “entonces todo el tiempo le estamos recargando las botellas” a los biciperegrinos. Lo que las Matecocideras hacen es casi indispensable para este tipo de actividades, teniendo en cuenta que en esta etapa del año, el calor es agobiante. Llegan el día 7 y esperan con ansias a la Virgen que a la medianoche sale a saludar a los peregrinos que llegan de distintas partes para festejar su día.
Los Amigos del Pupitre
Verónica contó que tras la peregrinación y el saludo a la Virgen regresan todos a compartir con sus familias un almuerzo comunitario. “La familia nos espera ya con el almuerzo, para agradecer todos juntos”, dijo.