Este municipio reglamentó el uso de carros de comidas rápidas en la vía pública dentro del eje urbano de la ciudad. El proyecto de ordenanza sobre “food trucks” finalmente tiene su ordenanza acorde a la demanda de los últimos meses en esta localidad, la cual creció mucho y se cree que en la época de la temporada de verano estarán muy activos.
La iniciativa fue presentada por Alberto Poliszuk, quien indicó que “este es un proyecto de ordenanza que deja sin efecto el anterior”.
De acuerdo a lo expresado por el edil, se suscitaron algunos inconvenientes por el funcionamiento de los food trucks, “que estaban en donde no correspondía”.
Entonces realizaron una reunión para tratar el tema y “ahora están habilitados para realizar sus labores en cualquier punto de la ciudad, siempre a 100 metros de los locales fijos relacionados y con las exigencias como cualquier comercio, con sus medidas sanitarias, de seguridad, manipulación de alimentos y la parte tributaria acorde (con la mínima todos los meses). Y siempre deben estar autorizados por el Municipio”, enfatizó el concejal.
El edil Juan Ahumada, quien planteó las limitaciones que tenía la antigua ordenanza, explicó que solicitaron “que se delimiten para quienes deseen comercializar con estos food truck, pero no existía ningún tipo de ordenanza completa, entonces nos reunimos con los propietarios y armamos la nueva norma, porque la anterior era muy limitada”.
“Nos abocamos en el aspecto técnico: antes se hacía un pedido de autorización por un día puntual, ahora lo que se hizo es que tengan una habilitación comercial como cualquier otro negocio y puedan trabajar cuando quieran, manteniendo la limitación con un comercio que venda comida”.