Una imagen vale más que mil palabras. Sin embargo, esta vez, una fotografía del festejo de cumpleaños de la primera dama, Fabiola Yañez, en la Quinta presidencial de Olivos fue eje de un gran escándalo que deterioró fuertemente la imagen del gobierno de Alberto Fernández.
La fotografía era de julio de 2020 pero se filtró el 12 de agosto de 2021 con la periodista Guadalupe Vázquez en el canal LN+. Allí se ve a Fernández, a Yañez y otros nueve invitados al festejo en medio de las estrictas restricciones que regían para el resto de los argentinos, determinadas por el Presidente por la pandemia de COVID.
Una semana antes apareció una primera imagen de aquel día de cumpleaños, pero publicada en Twitter por el usuario @gonziver que el Gobierno minimizó.
Días después, la Justicia decidió imputar tanto a la pareja presidencial como a Sofía Pacchi, Santiago Basavilbaso, Emanuel López, Fernando Consagra, Stefanía Domínguez, Federico Abraham, Carolina Marafiotti, Rocío y Florencia Fernández Peruilh.
Todos podían ser juzgados por violación al artículo 205 del Código Penal, que establece que “será
reprimido con prisión de seis meses a dos años el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia”.
Pero Alberto Fernández presentó un escrito ante el juzgado donde está radicado el caso pidiendo su sobreseimiento y se comprometió a enviar la mitad de su salario como presidente durante cuatro meses al Hospital Malbrán a modo de reparación del daño. En su presentación, hecha por derecho propio, es decir sin abogado defensor, Fernández sostuvo que el delito no fue configurado.
Si bien Alberto y Fabiola ya pagaron millones de pesos en concepto de “reparación integral del daño”, una ONG y familiares de víctimas del COVID pidieron ser querellantes en la causa, por lo que el sobreseimiento definitivo aún está en stand by.
En el mismo expediente se analizan las conductas de otras personas que ingresaron a la residencia
presidencial mientras regía el estricto aislamiento preventivo y obligatorio decretado por Fernández.
Se trata de las visitas de -entre otros- la actriz Florencia Peña, del adiestrador canino Ariel Alonso Zapata, del veterinario Lautaro Romero y de la animadora Tamara Pettinato.
La lesionada imagen del presidente Fernández tuvo repercusiones electorales en septiembre y noviembre del año pasado. Dentro y fuera del FdT admitieron que en parte fue por el Olivos Gate la floja performance del oficialismo en los comicios de medio término.