Cuatro ciudadanos iraquíes que iban a viajar hacia la ciudad de Ámsterdam en un vuelo de KLM fueron detenidos por autoridades del Aeropuerto Internacional de Ezeiza por presentar documentos falsos.
El hecho sucedió el lunes por la noche, pero recién este miércoles la justicia informó el caso que continúa en investigación mientras las personas están detenidas en la oficina de Guardia de Prevención.
Según se indicó, la Dirección Nacional de Migraciones verificó irregularidades en los documentos de los ciudadanos iraquíes que venían de Brasil, por lo cual la Justicia tomó partido en el tema en el que se los acusa de posible delito de falsificación de documentos públicos y contra la fe pública.
Los detenidos serían todos jóvenes de entre 20 y 23 años y se encuentran incomunicados a la espera de la resolución que dé a conocer la Justicia tras la investigación sobre la documentación falsa presentada y acerca de en qué consistía su viaje a la capital de Países Bajos.
El juez Federico Villena es el encargado de llevar a cabo la investigación, quien también está al frente de la causa del avión venezolano-iraní retenido en el Aeropuerto de Ezeiza. Todavía se desconoce si había algún documento en el Registro Nacional de Reincidencia y de Interpol que indicasen que esos ciudadanos tenían antecedentes o eran buscados.
El ya mentado caso del avión venezolano-iraní
Hace ya mas de dos meses, exactamente el pasado 6 de junio una aeronave procedente de México perteneciente a la empresa empresa Transportes Cargo del Sur (Emtrasur), una filial de la venezolana Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios aéreos (Conviasa), bajo sanciones de la Oficina de Control de Activos Extranjeros y Sanciones del Departamento del Tesoro estadounidense (OFAC), aterrizaba en Córdoba, con 14 tripulantes venezolanos y cinco iraníes, y según consta en el primer informe traía autopartes. Vale recordar, que primero aterrizó en Córdoba, como consecuencia de la neblina en Buenos Aires, y por la tarde, se dirigió a Ezeiza. Allí, en el Aeropuerto, la delegación fue recibida por la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), la Aduana, la Dirección de Migraciones y la Policía Federal al recibir información de inteligencia aportada por distintas agencias del mundo. “Con posterioridad al ingreso se recibió información de organismos extranjeros que advertían acerca de la pertenencia de parte de la tripulación a empresas relacionadas con la Guardia Revolucionaria de Irán”, y a partir de allí comenzó una controversia de público conocimiento, donde el avión y los pasajeros aún permancen en suelo argentino, puesto que son investigados no solo por la justicia del país, sino también de Estados Unidos, Israel, y otros países de Europa y Asia.
Fuente: Noticias Argentinas