Este domingo, en pleno Día de San Cayetano, amigos de lo ajeno volvieron a entrar a robar en la capilla San Agustín del barrio El Lucero de Posadas, un templo católico que de un tiempo a esta parte viene siendo blanco predilecto de los ladrones.
Según contó en las redes sociales el sacerdote Gervasio Silva, párroco de Jesús Misericordioso de la que depende la capilla damnificada, “hace poco más de un mes nos robaron el portón y anteriormente garrafas y ventiladores. Ahora hicieron un boquete en la pared y se llevaron 20 sillas de plástico color negro. Intentaron sin éxito abrir el sagrario”.
“La verdad duele mucho la inseguridad en la que vivimos. Duele el sistema de justicia que deja totalmente desamparadas a las personas de bien y beneficia constantemente a los delincuentes. Sabemos quiénes nos roban, son siempre los mismos, esos que los policías detienen y la Justicia luego de 24 horas libera, habilitándolos a que salgan a robar lo que se puede robar y romper lo que no pueden robarse“, lamentó el sacerdote en Facebook.