El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, admitió este jueves que hay casos de corrupción en su Gobierno, pero aseguró que son “aislados” y que la corrupción en su gestión no es “endémica”.
En un evento organizado por la Confederación Nacional de la Industria (CNI) en la capital Brasilia, Bolsonaro aseguró que su Gobierno combate la corrupción.
“El estudio avanzado del ingreso de Brasil en la OCDE es la señal que Brasil está bien visto globalmente. Nosotros atacamos la facilitación de negocios, así como el combate a la corrupción. En esto estamos muy bien en el Gobierno. No tenemos ninguna corrupción endémica en el Gobierno”, afirmó.
En los últimos días, la prensa brasileña expuso un caso de corrupción protagonizado por el exministro de Educación, Milton Ribeiro, cuando era el titular de la cartera, habiendo favorecido teóricamente pastores evangélicos próximos a él. Bolsonaro no quiso hacer referencia explícita al caso.
“Hay casos aislados que salpican, y buscamos una solución para esto. Pero además de la elección de los ministros, además de conversar con ellos cuál es su función de verdad, en cada ministerio tenemos una célula de funcionarios de la Policía Federal, de la Contraloría General y del mismo Tribunal de Cuentas para analizar lo que es demasiado caro para nosotros”, agregó.
“De modo que atacamos la posible corrupción en el origen. No interesa descubrir el corrupto, queremos evitar que aparezca la figura del corrupto”, dijo Bolsonaro.
Ante un público formado por empresarios, Bolsonaro avanzó que si es reelegido en el cargo en las elecciones de octubre, pretende recrear el Ministerio de Industria y Comercio, cuyo ministro lo elegirán los empresarios.
“Seréis vosotros quienes elegirán al ministro, con vuestro perfil, precisamente para tener libertad para trabajar”, explicó.
Bolsonaro prometió durante la campaña electoral de 2018 que su Gobierno tendría 15 ministerios, aunque finalmente lo amplió a 22 y actualmente tiene 23.
Fuente: Noticias Argentinas