La vida de Luciano Vera (20) cambió para siempre el 20 de diciembre del año pasado. La muerte inesperada de su papá Sergio le obligó a replantearse su presente y su futuro. Sabía que la única manera de sobrellevar una tragedia de esa magnitud era cerca de su familia.
Pero en ese entonces, su presente era el FC DAC 1904 de Eslovaquia, a miles de kilómetros de su Wanda natal. Para colmo, en enero, días después del hecho que cambió su vida, tuvo que volver al Viejo Continente.
Se hizo muy difícil sobrellevar el dolor lejos… entonces le avisó al presidente del club eslovaco que se volvía a Argentina a como dé lugar. “Le dije que no volvía más, que si no conseguía club acá iba a dejar el fútbol, pero necesitaba estar cerca de mi familia”, recordó en una charla con EL DEPORTIVO desde Maipú, Mendoza, su nuevo hogar como jugador del Deportivo Maipú. “Estoy feliz de estar en Argentina y cerca de la familia”.
Luciano, estuviste año y medio en el DAC, ¿cómo surgió la posibilidad de volver?
Era lo que yo quería. Le pedí a mi representante porque quería estar cerca de mi familia. Después del fallecimiento de mi papá no me recuperé emocionalmente bien y necesitaba estar cerca para agarrar la confianza que tenía antes. Cuando terminó la temporada y me vine le avisé al presidente que no volvía más, que si no conseguía club dejaba el fútbol. Yo venía con la idea de quedarme y nadie iba a cambiar eso.
¿Entendieron la situación en Eslovaquia?
No entendieron nada, ellos pusieron mucha plata y no les importaba. Me dijeron que seguía siendo jugador de ellos y que si no conseguía nada me tenía que volver y además me hicieron problemas cuando firmé acá, y eso que yo había peleado con el técnico y no estaba jugando. Eso también influyó en mi decisión de volver, pero yo tenía esa idea desde que me fui en enero.
Y apareció Maipú, ¿qué otras chances manejabas?
Tenía oportunidades de Primera también, como Rosario Central, pero no se querían hacer cargo del pago y entonces surgió lo de Deportivo Maipú. Yo estaba decidido a volver porque la estaba pasando mal en serio. Viajó Celeste, mi pareja, porque estaba muy solo y estaba sufriendo. Me llamó mi representante, me dijo que tenía esta oportunidad concreta y le dije que le mande para adelante. A las dos horas me llamó el técnico de Maipú, Juan Manuel Sara, y me dijo que me venga, que justo le faltaba un lateral con mis características. Gracias a Dios surgió esta posibilidad. Cuando me dijeron Mendoza dije vamos para adelante.
¿Te gusta Mendoza?
Está bueno, me gusta, además hablamos el mismo idioma. Ya estaba cansado del eslovaco, no entendía nada (se ríe).
¿No te llegaste a amigar con el idioma eslovaco?
No, qué me voy a amigar. Yo quería venir ya adonde se habla castellano. Donde podés ir a un supermercado tranquilo y que te entiendan. Estoy re contento.
¿Ya tenés todos los papeles para jugar?
Creo que ya llegó todo, pero el técnico está esperando que me ponga al 100%, porque hace un mes que no juego. Tengo que seguir entrenando con todo y prepararme porque mi mamá viene a verme, ahora que se toma un avión y en un par de horas está acá. Además está Celeste, porque ya nos casamos.
¿Se casaron?
Sí, fue todo muy privado, no compartí nada. Teníamos fecha para el 25 de diciembre del año pasado, con fiesta y todo, pero el 20 falleció mi papá y suspendimos todo. El 5 de enero, antes de viajar a Eslovaquia, nos casamos en el patio de mi casa, solo con la familia e hicimos algo tranqui porque no estábamos de ánimo.
Ahora, entonces, ya tenés compañía adonde vayas.
Eso es lo bueno. Ella viaja conmigo porque en estas situaciones uno necesita alguien cerca.
Contento de estar de nuevo en Argentina entonces…
Feliz de estar acá, cerca de la familia y en un lugar tan tranquilo. Re feliz estoy.
¿Qué objetivos te pusiste en esta nueva etapa?
Mi objetivo es poder jugar todos los partidos que restan del campeonato y hacerlo de la mejor manera para que también Maipú pueda pelear algo. Esta va a ser una experiencia nueva para mí porque nunca jugué la Primera Nacional y también es la primera vez que voy a jugar en Primera en Argentina. Se empieza de cero otra vez, con nuevos objetivos y buscando salir adelante de esta situación que no es nada fácil, pero espero poder llevarla de la mejor manera.