Con sorpresa y cierto malestar, los vecinos de Garupá conocieron la negativa de la Municipalidad local a la ordenanza para castraciones masiva de mascotas, que se dio a conocer en la edición del Boletín Oficial del miércoles 8 de junio y donde se oficializa el Decreto Nº 0014 del Ejecutivo de Garupá que vetó la Ordenanza Nº 565/2.022, sancionada el pasado 19 de mayo por el Concejo Deliberante local, mediante la cual se creaba un programa denominado “Castración masiva y Gratuita”.
Sobre esta situación, el concejal Gustavo Ernst, en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones consideró la decisión del Ejecutivo de Garupá como lamentable. “Nos enteramos y nos dio tristeza porque teníamos la esperanza de trabajar sobre esta cuestión, que el Municipio aborde este tema que hoy es una problemática en Garupá de la cantidad de animales, perros y gatos que hay en la vía pública, además de los que tiene la gente en su casa y que se reproducen todo el tiempo”.
Indicó que la situación en el municipio requiere atención, ya que “los animales pasan frío, tienen hambre, son atropellados por los vehículos y generan accidentes. Es una problemática que irá creciendo porque al no haber castraciones, la tasa va subiendo constantemente”.
Entonces, planteó el edil, “no abordar este tema, nos parece que es no priorizar una cuestión que la gente viene solicitando y lo reclama mucha gente. En la charla con el vecino, hay un reclamo general sobre esta cuestión. No es un reclamo que está preocupado sólo por los animales sino el día a día de la persona que cruza caminando y lo atacan, lo muerden o tienen que salir corriendo”.
Con respecto al argumento del veto del Ejecutivo al proyecto, Ernst consideró que “es el mismo de siempre la cuestión de falta de fondos, los recursos. Nosotros tuvimos una reunión incluso con ellos por esta cuestión, donde desde el Concejo Deliberante entendíamos que esto es importante y el Ejecutivo no se movía del lugar de decir que no tenían los recursos necesarios. Ellos hacen un par de castraciones, entre 20 y 50 mes aleatoria pero en un municipio de casi 80 mil habitantes, claramente el segundo municipio más grande en cantidad de habitantes, es suficiente para abordar la cuestión”, insistió.
La ordenanza, de acuerdo a las precisiones que brindó el concejal, se tomó como base las castraciones que se realizaban en municipios como Posadas y Eldorado. “Teniendo en cuenta esos números nos pareció atinado, entendiendo que Garupá no tiene los recursos de Posadas, acercarnos a una cifra parecida que tenía Eldorado de 200 a 300 castraciones por mes. Además, si esto se aborda desde el principio, después va disminuyendo. Va bajando la cantidad de castraciones”.
En cuanto a la frecuencia de las castraciones en Garupá, Ernst indicó que tal como lo establece el veto, “es aleatoria, cuando el veterinario puede hacerlo en alguna delegación pero la verdad que no hay una política clara al respecto, no hay un objetivo de llegar a cierto número. Por ahí hacen 15, 20, 50 en un mes. No hay una cuestión organizada y programada, que uno sabe dónde ir, dónde van a estar”.
Agregó que si bien se avisa desde la Municipalidad dónde van a estar, una semana antes, la gente aprovecha y se acerca “pero no se ataca ni aborda de la manera en la que se debería”, sentenció el concejal.
Programa en marcha
Por su parte, el secretario de Gobierno de la Municipalidad de Garupá, José Luis Peralta explicó a Primera Edición que “el Municipio cuenta con un programa masivo de castraciones con asistencia, con vacunaciones y se lleva adelante de manera ordenada y programada”.
Asimismo, indicó que la decisión de vetar la Ordenanza Nº 565/2.022 fue porque “el Concejo Deliberante nos manda la norma imponiendo un número de 200 castraciones al mes. Nosotros contamos con dos profesionales, uno que trabaja a mínimo de costo y otra que es una persona adulta y está dentro de las personas de riesgo, por lo que está desarrollando sus tareas de manera limitada, aunque seguimos haciendo castraciones programadas y gratuitas en todas las delegaciones”.
Insistió Peralta que en la Ordenanza se imponía 200 por mes “y la verdad que no contamos ni con los profesionales ni los recursos. El Concejo, así como hace una ordenanza tendría que haber consultado primero al Ejecutivo con qué medios cuenta, los recursos tanto económicos como humanos. No hay un profesional que pueda realizar la cantidad de castraciones que ellos pretenden. Lamentablemente el Legislativo local no tiene idea de cómo se trabaja desde el Ejecutivo, entonces sanciona una ordenanza de algo que ya se está haciendo y de manera programada”, remarcó.
De esta manera, insistió que “la imposición de cantidad que ellos pretendían no vamos a poder cumplir, de acuerdo a nuestro sistema, proyección y recursos económicos, quirúrgicos y humanos. No podemos poner en vigencia esa ordenanza sin contar con los elementos que requiere”.
Pedidos de implementación
A modo de ejemplo sobre el pedido de contar con más castraciones, el 9 de mayo, Florencia Exequiel publicó en Facebook en el grupo de adopciones de animales un pedido de ayuda para castrar a una perra. En el mismo explicaba: “Gente necesitamos esterilizar a esta comunitaria con suma urgencia y en Garupá no contamos con algún centro de castraciones gratuitas! Según mis cálculos en junio/julio vuelve a entrar en celo. El veterinario me cobra $5.000 para castrarla y me urge hacerlo ya que en enero tuvo su primera camada y ella apenas tendrá 9 meses como mucho, necesito ayudarla a ella y a futuros perritos que nacen y no encuentran un hogar responsable! Me das una mano?”.
Por su parte, ante esta situación, Noelia Osterwalder, integrante de la Agrupación Gusy Acción Animal y coordinadora de la Red de Políticas Públicas, impulsores del programa de equilibrio poblacional expuso que “se debe comprender que es un tema de salud pública y que no puede quedar desatendida bajo ningún tipo de argumento.
Las medidas se deben tomar asignando los presupuestos necesarios ya que cada vez son más las comunidades que reclaman una solución urgente a este tema, pero al hacerlo también debemos tener en cuenta que sólo un Programa de Equilibrio Poblacional de perros y gatos bien implementado es lo que trae la solución al problema de sobrepoblación, y para ello debe cumplir con 6 características (masiva, gratuita, sistemática, temprana, extensiva y no excluyente)”.
Agregó que “es un programa modelo y lleva implementándose hace 25 años en diferentes municipios de todo nuestro país, resolviendo el problema de manera ética, eficiente y sobre todo económica, cuidando la salud de las personas, los animales y el ambiente. Garupá tendría que castrar por mes 390 perros/gatos para lograr el impacto deseado”.
Remarcando su postura, Osterwalder, manifestó “sabemos que la solución existe y es una: el Programa de Equilibrio Poblacional de perros y gatos, depende ahora de la voluntad del Ejecutivo que eso se materialice en su comunidad, por lo que desde la Red ponemos a disposición el programa, la experiencia y material tanto para el Ejecutivo como el Legislativo de la ciudad de Garupá”.