El ministro de Turismo de Misiones, José María Arrúa, trasmitiría al ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, y al presidente de Aerolíneas Argentinas, Pablo Ceriani, la preocupación por las pérdidas que generaría el cierre en temporada alta del aeropuerto de la capital misionera, desde el 15 de junio hasta finales de agosto por refacciones.
De acuerdo a las fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, el titular de la cartera de turismo de Misiones plantearía las preocupaciones en los encuentros que mantendría hoy con las autoridades nacionales, aunque el cierre sería inminente y desaprovechar la oportunidad de recibir inversiones para refacciones de esas características, haría perder la obra y los recursos destinados a ese fin.
Tal como lo publicó PRIMERA EDICIÓN, Gustavo Alvarenga, de la Asociación Misionera de Hoteles, Bares, Restaurantes y Afines (AMHBRA) advirtió que el cierre en temporada alta ocasionaría pérdidas importantes, por la fecha donde se desarrollarán las obras, “épocas de grandes eventos muy buenos que vienen a la ciudad y nos favorecen mucho y también los meses fuertes de corporativos (congresos, asambleas y otros encuentros), que es de lo que vive Posadas”.
Compromiso
Por su parte, Belén Hernández, titular de la Secretaría de Cultura y Turismo de Posadas consideró que “en el discurso de apertura de sesiones ordinarias el Gobernador anunció la reforma integral del aeropuerto para convertirlo en el verdadero portal del proyecto turístico que tenemos para la ciudad. Ciudad que además es la puerta de entrada a la provincia”.
Agregó que están “muy entusiasmados con este proyecto, que va a permitir, en una primera instancia, mejoras en la pista y la torre de control, lo que contribuye directamente con la seguridad de los pasajeros y la posibilidad de atender más vuelos. Este año tuvimos una ampliación de vuelos, tenemos tres aerolíneas volando de manera regular, y la posibilidad de seguir conectándonos me genera mucho entusiasmo”, insistió.
La funcionaria municipal aseguró que “la provincia, el municipio, la empresa concesionaria y las autoridades nacionales están trabajando de forma conjunta para que esta obra se haga de la forma más rápida posible, para que no afecte ni a los posadeños ni a los visitantes. Está el compromiso de todas las partes de trabajar de forma eficiente para lograr tener el aeropuerto que nos merecemos”.
Obra necesaria
Desde su punto de vista, el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Posadas, Sergio Guelman consideró que “la obra es muy necesaria para la ciudad de Posadas, más allá de los inconvenientes que genera el cierre por las refacciones, no cabe dudas que es un paso para la Capital de la provincia, que sigue creciendo, que cada vez es más importante y esto forma parte de los servicios de calidad que queremos ofrecer tanto en turismo como en oportunidad de negocios, con industrias que van creciendo y una propuesta comercial en constante desarrollo”.
Todavía no resolvieron quién o cómo se trasladará a los pasajeros
El ministro de Turismo, José María Arrúa, dijo que están trabajando en la alternativa de un boucher de traslado desde la terminal aérea de Iguazú hasta la de ómnibus de la ciudad y viceversa. Ahí finalizaría la responsabilidad de la aerolínea.
Además, en comunicación con Radio República, aseguró que están trabajando para acompañar la logística y realizar las obras en los plazos más cortos, con el fin de favorecer al pasaje que arriba o despega desde Posadas. Entre las opciones que se sugirieron se encuentra la de contactarse con los pasajeros que tienen reservas y plantear la posibilidad de reprogramar sus vuelos.
Por otra parte, detalló que están trabajando en la posibilidad de “un transfer desde el aeropuerto hasta la terminal de pasajeros (en Puerto Iguazú, que será donde se trasladen los vuelos que estaban programados para Posadas) para que la gente pueda tener la opción de los colectivos desde Iguazú hasta Posadas”.
El Ministro destacó la frecuencia de colectivos que hay y la calificó de interesante. “En promedio 45 minutos, hora, hora y media de espera por cada colectivo. La idea es que la gente pueda llegar y tener ahí la opción más rápida. Estamos trabajando para que puedan acceder a la terminal de ómnibus, a partir de ahí la aerolínea se desentiende. Es una cuestión de seguros. El pasajero va en el transporte vía aérea, entonces hacerse cargo de un seguro, desde Posadas hasta Iguazú o viceversa, son 300 kilómetros”, no sería factible.