El jueves Santo un joven de 17 años fue demorado por la policía en el barrio San Miguel, de Oberá, tras robarle el celular a una niña, cuando esperaba a su madre en un auto, puesto que la misma se había bajado a realizar unas compras.
La denuncia fue efectuada el miércoles por la noche. En la ocasión una mujer de 38 años, relató de que había descendido de su vehículo frente a un kiosco en el Barrio 180 viviendas y su hija de 11 años se quedó esperándola adentro con el celular en la mano.
En ese instante, se acercó un joven y de manera repentina le arrebató el artefacto y huyo de manera rápida del lugar.
Agentes de la Comisaría Quinta, junto a personal del Comando Radioeléctrico Norte, llevaron a cabo tareas para esclarecer lo sucedido.
Fue así que, lograron obtener información de que en el barrio San Miguel, estaría el involucrado. Ya en dicho lugar, la madre del señalado mencionó que su hijo había llegado con un celular del cual ella desconocía su procedencia. En ese momento, entregó teléfono e instantes después demoraron al menor.
Por último, el menor fue trasladado a la sede policial, donde fue notificado de la causa y posteriormente entregado a sus familiares, además el celular fue restituido a la pequeña propietaria.