El contrabando, que golpea fuertemente a las empresas e industrias nacionales, está aniquilando el mercado de los pequeños productores de azúcar rubio que se desarrollan en esta cuenca.
Así lo graficó a PRIMERA EDICIÓN, Mario Machado, un productor cañero de El Soberbio, quien en la actualidad se encuentra al frente de la cooperativa Nueva Esperanza. El hombre expuso que los productores de la zona no salen ilesos de esta práctica y las pérdidas llegan a niveles inimaginables.
“Lamentablemente estamos optando por bajar a cero la producción de azúcar rubio. La merma ya se había comenzado a sentir desde el año pasado, pero se acentuó en los primeros meses de este. Actualmente, para seguir trabajando nos centramos en la miel de caña y melao batido, productos tradicionales de la zona del Alto Uruguay, que todavía nos dejan algo de rentabilidad”, comentó a este Diario.
Machado también disparó contra la “competencia desleal” que se propicia en la Cuenca de la Zona Sur, quienes venden a granel y a muy bajo precio a los intermediarios, a razón de 60 pesos por kilo, quienes “reempaquetan y venden al doble de ese valor, pero con su marca en mercados de Córdoba y Capital Federal”, afirmó el hombre.
“Sigue creciendo sin freno la competencia desleal a partir de los precios con los cuales no podemos competir, mientras nosotros tenemos que cumplimentar con toda la reglamentación y estar al día con la cooperativa, nos vemos obligados a facturar 170 pesos por kilo. Por supuesto que perdimos a todos nuestros clientes”, agregó.
Informalidad histórica
La práctica de este negocio informal es histórica y con la crisis que envuelve al sector “vale todo”, comentó Machado, “perjudicando enormemente a los productores locales, en especial a los más pequeños”.
Al efecto, desde Cooperativa, sus socios manifestaron la desoladora situación, pues según indicaron a este Diario el perjuicio en promedio, llega hasta un 90%.
“Por supuesto que ante la diferencia de precio todos dejaron de comprarnos mascabo”, analizó el productor.
“Entendemos que, por la situación económica del país, nuestros clientes se inclinaron más a mirar el precio y dejar de lado el concepto de salud y calidad que significa consumir azúcar rubio natural como el que elaboramos nosotros”, enfatizó.
Y lamentó: “En la Zona Sur son muy precarias las fábricas, donde la falta de higiene está a la orden de día, pero sin dinero, se compra lo que hay y mientras tanto el resto perdemos el negocio”.
La nueva zafra arranca en junio
La producción volverá a dar fruto a finales de mayo y en los inicios de junio después de un verano que afectó seriamente al sector azucarero.
“La vida del productor se resume a eso: volver a empezar. En principio, estamos más que preparados, tenemos caña y la fábrica al día”, aseguró Mario Machado. No obstante, se van a afinar todos los lápices para encontrar un mercado rentable.
“Si prosigue este desequilibrio de precios que nos golpea, no vamos a poder producir porque si no hay venta, ¿para qué vamos a acumular de bolsas nuestros galpones?”, se preguntó.