El Juzgado Federal 2 de Corrientes le dictó la prisión preventiva a ocho hombres oriundos de Misiones acusados de integrar una banda narco que transportaba marihuana desde Ituzaingó (Corrientes) hacia grandes ciudades del país. Les adjudican tres intentos de ingresar droga al país y donde perdieron a manos de las fuerzas federales más de 10 toneladas de ese estupefaciente.
La droga era adquirida en Paraguay y traída en embarcaciones a través del río Paraná hacia la costa argentina, en este caso de la provincia de Corrientes, donde la cargaban en vehículos.
Finalmente y tras varios meses de escuchas telefónicas la organización delictiva dedicada al tráfico de drogas fue desbaratada.
La gavilla era conocida por las autoridades como “La banda de los Carpinchos”, ya que de esta manera denominaban en nombre clave al rodado donde cargaban la marihuana. Llamativamente y pese a que las operaciones ilícitas que les adjudica la Justicia eran realizadas en suelo correntino, ninguno de ellos es oriundo del lugar, ya que son todos de Misiones.
El operativo que realizó Prefectura Naval y por el cual comenzaron a ser detenidos, se concretó la madrugada del jueves 27 de mayo de 2021.
“Perdimos”
Pese a que la neblina les jugó a favor ese 27 de mayo del año pasado, quizás los narcos no contaron con las cámaras de visión térmica que colocaron los prefecturianos en sus puestos de observación, a la vera del Paraná y a la altura del lago de la represa Yacyretá, en Ituzaingó.
Fue así que minutos después de las 4 un grupo de efectivos irrumpió al ver que descargaban bultos en la costa. Los individuos que descargaban lograron escapar y abandonaron un bote en el lugar.
En una de las escuchas se pudo establecer que uno de los implicados le comunicó en esos momentos a otro cómplice la palabra “perdimos”, en claro mensaje de que los habían descubierto e incautado la marihuana.
El chofer del camión con acoplado donde se cargaba la droga, un hombre oriundo de Córdoba, tenía casi listo el vehículo para partir con destino a Buenos Aires. Este noveno integrante de la banda ya tiene firme la prisión preventiva.
El rodado, marca Volvo, supuestamente llevaba troncos de pino, entre los cuales hallaron el estupefaciente acondicionado especialmente y en forma disimulada para evitar ser descubiertos en los controles viales. Como resultado de la requisa y ante la presencia de testigos, se constató que se trataba de un cargamento de más de 6 mil kilogramos de cannabis sativa, entre panes y cogollos de la misma sustancia.
Las otras dos causas
La captura del conductor del camión cargado con drogas y el secuestro del estupefaciente supuso una punta de ovillo.A partir de allí las autoridades ya contaban con escuchas telefónicas previas y seguirían interceptando teléfonos de sospechosos hasta lograr desbaratar al cien por cien de la organización.
Los involucrados habrían intentado ingresar droga al país nuevamente y a través de Ituzaingó en dos ocasiones más, tal como figura en el auto de procesamiento al que tuvo acceso PRIMERA EDICIÓN.
La primera fue el miércoles 30 de junio del año pasado, cuando fueron secuestrados en la zona del lago Yacyretá 763,587 kilogramos de marihuana recién cargados en una camioneta Toyota Hilux.
El otro fue el sábado 3 de julio de ese mismo año, cuando fueron secuestrados en un camión Ford F4000 un total de 5.330 kilogramos de cannabis sativa cerca del mismo lago, esta vez a la altura del kilómetro 1.527 del río Paraná. La droga también había sido recientemente cargada.
Entre los imputados figuran dos hermanos posadeños sindicados como los presuntos líderes de la banda, luego hay otros dos individuos oriundos de la capital provincial, uno de los cuales figura en la resolución como chofer del Ministerio de Desarrollo Social.
Se completa con otros dos hombres con residencia en Cerro Corá, uno de los cuales era empleado municipal, otro de Garupá y el octavo es de Candelaria.
Dos con domiciliaria
A dos de los imputados les dictaron la prisión preventiva modalidad arresto domiciliario por razones de salud, en tanto que los otros seis deberán esperar que se resuelva su situación procesal en cárceles federales.
A todos se les imputó el delito de “transporte de estupefacientes a los fines de la comercialización agravado por la cantidad de personas intervinientes”, con distintos grados de participación.