Finalmente, después de varias idas y vueltas la Argentina firmó este miércoles la declaración de Glasgow y el tema, que acapara la agenda mediática mundial fue analizado con una mirada crítica por ambientalistas locales, porque en los hechos “se hace lo contrario”.
“En Misiones hay Reservas Privadas de grandes superficies que por preservar no reciben lo que por la Ley de Bosques les corresponde. Hasta la propia Misiones ha sido retaceada por la Nación en esto”, fue la opinión crítica del ambientalista misionero e integrante de Kaa’puera, Rulo Bregagnolo.
“La mayor crítica que hacemos desde nuestra organización es que más allá del acuerdo la verdad es que jurídicamente no es vinculante, no genera una obligatoriedad en términos jurídicos que sancione al Estado si no cumple”, dijo a PRIMERA EDICIÓN Lucas Micheloud, integrante de Abogados Ambientalistas de Argentina.
E ironizó: “De hecho lo firma Jair Bolsonaro que se está llevando puesta la selva amazónica en Brasil y en Argentina, este convenio va a ser igual de superfluo”.
“Es muy probable que la deforestación en lugar de frenarse se expanda, nuestro país pierde 200 mil hectáreas de bosques nativos por año. Este acuerdo en síntesis pareció a otros similares y la reacción que hay desde las empresas extractivistas (sector ganadero, agropecuario, minero y forestal) han avanzado. Por lo tanto, más allá de la necesaria declaración formal de los países que concentran el 85% de los bosques del mundo, la verdad es que no creemos que vaya a ser una solución para nada”.
“Hacia adentro, Argentina está en doble infracción, no se cumple ni siquiera con la Ley de Bosques, el presupuesto de este año no aplicó ni el 4% de lo que debería. A todo esto, en las últimas tres décadas el país perdió 8 millones de hectáreas de sus bosques nativos; a su vez tampoco hay una política energética que vaya hacia la descarbonización”.
Carlos Tanide, referente de temas vinculados a Ambiente y Energía de la Fundación Vida Silvestre Argentina, quien hoy viajará a Glasgow, también mencionó algunos cuestionamientos al respecto.
“Vamos a participar en distintas mesas, pero es verdad: vista la cosa aquí y allá, el asunto es que hay mucha declamación, inclusive muchos compromisos que se firman y luego se incumplen como la Ley de Energías Renovables, lo mismo la Ley de Bosques y es el mayor problema: los hechos no acompañan los discursos”.