La alegría de ayudar a los que menos tienen muchas veces tiene un sabor agridulce para quienes llevan adelante esa acción solidaria, “porque significa que cada vez hay más gente que necesita de una taza de leche, un plato de comida o un abrigo”, coinciden quienes están al frente del comedor y merendero “Ellos no tienen la culpa”.
Ubicado estratégicamente en el corazón de la Chacra 159, en la intersección de las calles 44 y 137 (entre Centenario, Tambor de Tacuarí , Jauretche y Vivanco), este lugar asiste a decenas de niños y adultos que llegan en busca del almuerzo o la merienda.
“Esto nació hace ocho años ya como merendero y comedor, actividad que se sostuvo a pesar de los diferentes inconvenientes que fueron surgiendo, a los momentos críticos en los que transitamos. Hoy estamos asistiendo a más de 150 familias con una frecuencia de tres veces por semana con almuerzo y merienda”, explicó Mario Fedorischak, el principal impulsor del comedor.
Agregó que “también nos movilizamos para conseguir donaciones de ropas, abrigos, frazadas, calzados para la gente de la zona y cuando estamos pronto a iniciar las clases todo lo relacionado con los útiles, guardapolvo y otras cosas que necesitan los chicos”.
Fedorischak detalló que “también solemos repartir alimentos no perecederos para los más necesitados porque a veces se les complica venir a retirar la porción de comida, incluso hay personas que tienen dificultades para desplazarse por la edad o alguna enfermedad entonces consideramos que es necesario entregarles los productos para que quienes los cuidan puedan cocinar algo para ellos”.
También en “Ellos no tienen la culpa” se realizan otras actividades, como apoyo escolar para chicos de primaria y clases para los adultos, que se realizan en el edificio que con mucho esfuerzo fueron construyendo en estos años y consta de un espacio donde funciona un aula (8 x 8 metros), un taller, una biblioteca, un comedor principal (12 x 5 metros) y una cocina (4×4).
“Las clases las brindan dos maestras en forma completamente voluntaria. El almuerzo, mediante las gestiones que se realizan, hoy lo recibimos de la olla centralizada de Santa Rita, que dependen del Ministerio de Desarrollo Social”, comentó Fedorischak.
Donaciones
Quienes quieran y puedan colaborar con “Ellos no tienen la culpa” pueden acercar alimentos no perecederos y también prendas de vestir para todas las edades, desde niños hasta abuelos o comunicarse al 3764-153015.