Nueva ronda de testimoniales y pistas obtenidas por la Dirección de Homicidios de la policía, establecieron que habría un segundo sospechoso en la mira por el crimen de De Lima ocurrido el viernes pasado en el barrio San Miguel de San Pedro.
Fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN indicaron que hay un joven de aproximadamente 18 años que está desaparecido de la zona y habría estado en el lugar donde ultimaron a menor de 14 años a la vera de la exruta 14 en barrio San Miguel de San Pedro cerca de las 23 del viernes 4 de junio. Declararon en las últimas horas vecinos que aseguraron que el detenido (un joven de 18 años) habría estado en compañía de otro de la misma edad en la zona.
El juez que entiende en la causa, Ariel Belda, responsable del Juzgado de Instrucción de San Pedro, espera la declaración de la madre de la víctima y su hermano (Cámara Gesell porque es menor) para los próximos días.
Si bien el único detenido que hay hasta el momento declaró ante el magistrado y se manifestó inocente, seguirá tras las rejas y fue imputado provisoriamente por “homicidio simple”. Ahora surge que tendría participación un segundo sospechoso y que podría ser el que finalmente agredió con un arma blanca de gran filo a la víctima.
Una de las hipótesis del móvil del crimen, es que la víctima estuvo con su hermano y madre compartiendo reunión con otras personas entre las que estuvo aparentemente el agresor y éste se molestó cuando el menor de 14 años no le quiso prestar dinero para comprar bebidas. La otra es que el ataque se produjo al azar y por una persona bajo los efectos de una bebida o sustancia alucinógena.
Será clave la declaración de una mujer de 45 años, madre del fallecido, ya que fue quien estuvo cerca del agresor al momento que intentaba defender a su hijo. Supuestamente en sede policial adelantó que no conoce al agresor y esto haría caer la hipótesis de que tanto víctima como victimario estuvieron en una reunión momentos antes del desenlace fatal.
La primera detención se concretó en la zona por parte de efectivos del Comando de la Unidad regional VIII de San Vicente tras declaraciones de lugareños quienes afirmaron ver al sospechoso cerca de la zona y corriendo hacia un yerbal “con algo en la mano y ropa manchada con sangre”.
De Lima murió como consecuencia de un certero corte con arma blanca en la zona del cuello de unos 12 centímetros de longitud y otros 5 de profundidad. El ataque fue letal y casi lo decapita según confiaron las fuentes.
La policía de la zona continúa los rastrillajes a los efectos de dar con el arma utilizada que a juzgar por el tipo de lesión, pudo ser un machete de tamaño mediano o grande con gran filo, parecido al utilizado para la tarefa, actividad a la que estaría ligado el sospechoso detenido, el segundo presunto involucrado y también la víctima como la mayoría de los que viven en esa zona.