En plan vacacional, el presidente del Concejo Deliberante de Posadas, Facundo López Sartori, lanzó vía sus redes sociales una consulta a sus seguidores respecto a la posible habilitación o no de una playa nudista en Posadas.
Aunque no se sabe si la etapa veraniega lo excluye de expresarse en nombre del cuerpo deliberativo, no hubo concejales que salieran a desmarcarse del debate “popular” en redes.
En tiempos donde hay tantos problemas por resolver en la capital misionera y en el cual el Concejo debiera ser un generador de normas que permitan resolverlos, parece que los ediles posadeños están preocupados por “los ingresos” que podría generar una playa nudista.
Dejando de lado la oportunidad de negocio para el futuro concesionario, los ciudadanos de Posadas esperan de quienes se llaman sus representantes otros debates que hacen al día a día de decenas de miles de personas.
Como López Sartori aparece en este 2021 un poco desnudo de ideas, van algunas sugerencias. Empezando por la continuidad del Grupo Z al frente del monopólico negocio del transporte integrado, donde se podría consultar a los usuarios sobre cómo fueron estas más de tres décadas y en un año donde hay que resolver quién presta tamaño servicio.
Otra puede ser la burocracia estatal en su relación con los ciudadanos en tiempos de pandemia, donde el mundo tiende a lo virtual. ¿Cuántas ordenanzas sacó el Concejo Deliberante para que se digitalicen las acciones más importantes para evitar las aglomeraciones en las dependencias públicas?
Y así pueden seguir la falta de normativa municipal sobre el sistema de fotomultas y la distribución de la recaudación; preocupaciones barriales por servicios, seguridad, el tránsito, el estado de los edificios escolares para el reinicio del ciclo lectivo, cómo colaborar desde la comuna para una eventual campaña de vacunación donde harán falta voluntarios en caso ser más masiva, etc.
Es evidente que hay mucho por resolver. El problema se presenta cuando el titular de un cuerpo como el Concejo Deliberante (caja de resonancia de las inquietudes de los vecinos) se queda en cuestiones menores como la posible llegada de una playa nudista. Hay que dejar de desnudar la falta de ideas y mostrar que alguna queda.