Luego de una pormenorizada investigación, la Justicia avanza en la causa que mantiene tras las rejas a cuatro integrantes de una banda que el pasado 27 de septiembre asaltó a un matrimonio y su nieta en Puerto Iguazú. Los delincuentes los habían retenido dentro de la vivienda, los lastimaron y cuando sus víctimas “cantaron”, se retiraron llevándose una fuerte suma de dinero.
En las últimas horas el Juzgado de Instrucción 3 de Puerto Iguazú, a cargo del magistrado Martín Brites, le dictó la prisión preventiva a cuatro brasileños, de los cuales uno de ellos es comerciante y medio hermano del hombre asaltado. Se presume que fue él quien reclutó a la banda y le brindó los datos sobre el dinero que podía tener su pariente.
Fueron imputados por “robo calificado por el uso de arma de fuego”. Uno de ellos está sindicado como “partícipe necesario” del robo. El abogado de los acusados había pretendido que se le rebajara la calificación, tras argumentar que no se podía probar si el arma que utilizaron efectivamente estaba apta para el disparo. Esta solicitud finalmente fue rechazada por el juez.
Según se desprende del expediente, era una mañana de domingo cuando una mujer llegó a la vivienda del matrimonio ubicada sobre la avenida República Argentina. Tenía acento brasileño y preguntó por alquileres. En ese momento irrumpieron dos hombres que obligaron a la mujer a ingresar a la casa. La maniataron y amordazaron a ella y su esposo, todo esto a la vista de una nieta.
Armados, los malhechores amenazaban con hacerle algo a la menor hasta que finalmente los abuelos sucumbieron a las intimidaciones y les dijeron dónde estaba la caja fuerte. Se llevaron unos 900 mil pesos, dólares y reales. Subieron a un remís y escaparon del lugar.
Las víctimas estuvieron cautivas por espacio de dos horas, esto pudo establecerse porque un vecino había visto que los sospechosos habían descendido de la unidad. El vehículo se quedó esperándolos muy cerca todo ese tiempo. Tras la intervención policial y del juzgado, el remisero fue citado primero como testigo, hasta que luego se comprobó que tenía que ver con el grupo de asaltantes.
Dos días después se dispararon una serie de allanamientos que permitió detener a los sospechosos. Además incautaron tres vehículos, un Renault Fluence, un Chevrolet Prisma, un Citroën Xsara y dinero en efectivo. En una de las viviendas allanadas en el barrio Nuevo Iguazú, además encontraron ocho kilos de cannabis distribuidos entre panes y cogollos del estupefaciente.
Dos de los detenidos son de San Antonio y se cree que fueron los que hicieron contacto con los delincuentes brasileños para llevar a cabo el atraco.