La Pastoral de Adicciones de la Diócesis Oberá, presentó avance de obras del nuevo espacio del que dispondrán. Se trata de la sede propia, por lo que representa un importante avance para la significativa tarea de atención a personas adictas y sus familias. La nueva casa se llamará “Oasis de Misericordia” y empezaría a funcionar a fines de julio.
El equipo interdisciplinario no detuvo acciones en la actual situación de emergencia sanitaria y epidemiológica, aunque representó un retroceso, por la imposibilidad de la presencialidad determinada por la cuarentena.
Según datos dados a conocer por la Pastoral, en lo que va del año al mes de mayo inclusive, tuvieron casi 600 consultas, de las cuales 202 correspondieron al grupo etario de 10 a 20 años y 126 de 20 a 30. El 60 por ciento sexo masculino, el 40 femenino.
“Por suerte estamos cada vez más cerca de la posibilidad de ampliar nuestros horarios de atención, estábamos en sede de Cáritas, pero vamos a disponer de este espacio que será más liviano y daremos mayor oferta a los sufrientes, para que puedan venir todos los días. Según nos dijo el ingeniero responsable de la obra en un mes estaría”, comentó José Fabio, presidente de la Pastoral.
“Esta exposición de datos no es para exhibir el trabajo, sino para visibilizar el problema que tenemos y que todos sepan que podemos ayudarlos. Hemos incorporado una nueva médica psiquiatra, así que son dos ahora. También tenemos dos psicólogas, dos trabajadores sociales. Tendrá su lugar Narcóticos Anónimos. Vamos trabajando en función de la problemática de la que hay que hablar”, destacó.
Por su parte el Párroco de la Catedral San Antonio, a la que pertenece el predio, relató el proceso de darle utilidad al mismo y cómo surgió su nominación.
“Este espacio es un tesoro en el centro de la ciudad, lugar donde por 40 años funcionó la guardería San Antonio. Antes de iniciar la obra, la cooperadora San Antonio pensaba de qué manera utilizarla. Así maduró la idea de una casa de uso pastoral, compartido para distintos movimientos y asociaciones laicales, parroquiales y diocesanos. Justamente el grupo que necesita un espacio geográfico es la Pastoral de Adicciones, por lo que se pensó el lugar para ellos y otros grupos”.