A las 7.30, un vecino alertó a la Unidad Regional II de la Policía que en su patio había un animal de la mencionada especie, lo que disparó un operativo de rescate que hasta el cierre de esta edición no había sido fructuoso.
“Apenas me avisaron fui al lugar mencionado, calle Malvinas, y efectivamente había un felino de tamaño importante en el fondo del terreno. No sabemos cómo llegó al lugar. Lo vi personalmente e incluso le saqué un par de fotos. Cuando nos vio entrar, saltó un muro y se fue hacia un terreno lindante. Dimos la vuelta y volví a verlo. Luego se fue hacia Villa Blanquita, una zona de monte, y se metió ahí”, relató Jorge Krujoski, personal de la delegación Oberá del Ministerio de Ecología provincial.
A la búsqueda se sumó personal de Gendarmería Nacional, pero ya no lo pudieron encontrar.
“Seguimos con el operativo por la zona, pero ya no lo volvimos a ver. Después recibí un llamado de la comisaría Quinta, donde un vecino avisó que lo vieron en la zona de (los barrios) 180 y 200 Viviendas. Fuimos a recorrer esa parte de monte y pudimos obtener imágenes del rastro del felino, pero no así al animal. Al mediodía dejamos la búsqueda por la lluvia y retomamos a la tarde, pero le perdimos el rastro”, lamentó Krujoski, quien advirtió que el animal puede recorrer varios kilómetros en un día.
Mientras prosigue la búsqueda, a la que se sumará la Red Yaguareté, “estamos también en investigación de dónde salió. Estimamos que podría haber estado en cautiverio y que pudo haberse escapado o lo largaron, porque en las fotos que tomamos lo vimos flaco y para nada agresivo. La vecina que lo vio por primera vez salió a tomar su mate al patio y estaba a escasos tres metros”, refirió antes de remarcar que “el cautiverio está totalmente prohibido: si se comprueba y encuentra a quien lo tenía, seguramente será pasible de una multa. Todas las autoridades están al tanto del tema”.
“No intenten capturarlo”
Krujoski insistió con los recaudos que deben tomar los vecinos: “El animal en sí no es agresivo, no ataca a las personas, salvo que se vea acorralado, por lo que pedimos que informen inmediatamente si lo ven con datos precisos del lugar. No intenten capturarlo y menos aún agredirlo. Es probable que busque alimento, por lo que puede atacar a un perro. También lo vimos estresado y asustado, lógicamente, porque no está en su hábitat”, resumió.