Se termina el año. Mañana lunes será el último día hábil que le quedará a un 2019 difícil, en todas las áreas pero muy especialmente en materia social y económica. Deja un balance pésimo y negativo para los argentinos. En especial para aquellos que un cambio de calendario no les aliviará la frustración ni les mejorará la alimentación ni les devolverá el trabajo perdido en este 2019. Si algo no se debe perder es la esperanza y, aún con el pesimismo de lo vivido en los 362 días pasados, la gran mayoría de los argentinos espera mejoras en 2020.
Argentina está en emergencia declarada por el Congreso y reglamentada. Aunque no se necesitaba de la formalidad para percibir el grave estado, la ley sancionada le otorga herramientas al Presidente para tomar urgentes medidas.
En los últimos días, el Gobierno nacional acentuó el cúmulo de decisiones en materia económica. Tal como se viene comentando en este mismo espacio -incluso antes que Alberto Fernández asuma el poder – los equipos económicos tienen la “misión” del Presidente de generar una rápida y fuerte inyección de dinero circulante en el mercado, mejorando el consumo y aliviando los bolsillos fuertemente golpeados de las familias.
El Centro de Economía Política Argentina (CEPA), estimó que la Nación pondrá a circular este verano alrededor de 27.692 millones de pesos en tres medidas masivas.
Primero apareció el bono para los jubilados a pagar en diciembre y enero, de hasta $5 mil para alcanzar en el 60% de los jubilados el monto de $19.068. Esta erogación implicará poner en la economía unos $15.282 millones, según estimaciones del CEPA. A su vez, se ratificó que en marzo Fernández dará una actualización de las jubilaciones por decreto, aunque en febrero podría anunciar otro adicional. Algo similar se anunció con beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, que tendrán un bono de $2 mil en diciembre. A ese fin se suman $8 mil millones adicionales en diciembre.
Comenzó en algunos lugares, en Misiones todavía no, la implementación de la tarjeta Alimentar para familias con niños menores de 6 años, o con hijos discapacitados y para embarazadas desde los 3 meses de gestación con montos que van de $4 mil (en caso de tener un hijo) y de $6 mil (dos o más) sumará otros $4.410 millones mensuales al consumo, en este caso puntual de alimentos.
“Nos dijeron que para enero o febrero estarían, en un 80%, firmados los convenios con las provincias para poder implementarlos y nosotros estamos esperando la notificación de fecha para ir avanzando en ese sentido. Nosotros estamos a la espera de que el ministro Daniel Arroyo nos convoque para firmar el convenio que tienen que celebrarse entre la Provincia y la Nación, y recién a partir de ahí la estaríamos implementando aquí”, explicó a este Diario la ministra de Desarrollo Social de Misiones Benilda Dammer.
Se confirmó el regreso de la devolución de IVA por $700 a todos los beneficiarios de la AUH, jubilados y beneficiarios de planes sociales.
A su vez, se esperan detalles de las medidas para asalariados de clase media del sector privado. Se habló durante la semana de un bono para empleados registrados, por un valor de $6 mil a $9 mil de enero a marzo. Se estima que esta erogación podría inyectar unos $30 mil millones adicionales al consumo.
Compromiso Argentino para el Desarrollo y la Solidaridad
Alberto Fernández reunió a fin de esta semana a referentes de la UIA, la CGT y las organizaciones sociales (incluidos los piqueteros del CTEP de Juan Grabois, la Corriente Clasista y Combativa, Barrios de Pie y el Frente Popular Darío Santillán), para sellar el “Compromiso Argentino para el Desarrollo y la Solidaridad”. Pegó el faltazo la Mesa de Enlace del campo argentino.
En el texto que firmaron los mencionados, aseguraron querer “… empezar por lo más urgente para luego poder juntos abocarnos a lo más importante. Urgente es, en primer lugar, dar respuesta a la trágica deuda social con los argentinos y argentinas que sufren hambre y problemas de alimentación. Nos comprometemos, ante el aumento abrupto de la pobreza, a contribuir con un esfuerzo extraordinario a la obligación moral de poner en la mesa de todas nuestras familias el pan que a ninguna le debería faltar”.
El gran desafío del nuevo Gobierno es lograr cumplir con un compromiso anunciado por el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, cuando en campaña estuvo en Misiones y habló de la necesidad de abaratar el costo de los alimentos para garantizar su acceso. La inflación incontenible de 2019 no parece una señal de los sectores empresarios para ayudar a cumplirlo, especialmente de los grandes formadores de precios.
En el Compromiso, también aparece un guiño al Fondo Monetario Internacional (FMI) que llegará en los próximos días con la primera misión de revisión de los acuerdos firmados con Mauricio Macri y heredados por Alberto Fernández. Aún cuando el nuevo Presidente les anticipó que no quiere el desembolso de los dólares pendientes del mega préstamo tomado por su antecesor.
Antes de leer la cita textual, vale la pena recordar que Fernández dijo en entrevistas periodísticas que sin mejora social de los argentinos no se puede pensar en pagar la deuda, sin olvidar la necesidad de refinanciar los vencimientos del año 2020.
“En segundo lugar, esa urgencia se manifiesta en un endeudamiento público que, por su magnitud y la inmediatez de los compromisos de pago, exige a nuestro Gobierno un claro desafío. La voluntad de pago requiere condiciones compatibles con la atención de la deuda social y el crecimiento de la economía, en el marco de una ética pública de las prioridades que ponga a la dignidad humana por encima de cualquier otro interés.
Sin ello, sería imposible cumplir con las obligaciones que asuma el país. Reconocemos también la prioridad de la resolución sustentable de esa deuda pública. Expresamos nuestra confianza y respaldo a la gestión que ante los acreedores privados y organismos internacionales realizará el nuevo Gobierno argentino. No será la mera negociación de una administración. Lograr una solución sustentable será la tarea colectiva de todo un país que reclama poner a la producción y al trabajo por encima de la especulación financiera y la fuga de capitales”, reza el texto firmado.
Repatriación de fondos y limitación a importaciones
Con la ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva, el Gobierno actualizó las alícuotas de Bienes Personales en la reglamentación publicada días atrás. Sin embargo, esta semana se conoció una medida para quienes tengan bienes radicados en el exterior y que repatrien antes del 31 de marzo, al menos el 5% del valor total de sus activos, liberándolos de pagar la alícuota diferencial incrementada de Bienes Personales (que llega hasta el 2,25%). Deberán ingresar al país durante los próximos tres meses y quedar depositadas en el sistema financiero al menos hasta el 31 de diciembre de 2020.
En cuanto a las importaciones, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, confecciona por estos días una lista de las importaciones que volverán a quedar limitadas por “licencias no automáticas”, un sistema mediante el cual el Estado limita las importaciones de determinadas mercaderías. Se espera que entre los primeros productos alcanzados estén calzados, textiles y otras manufacturas. Sin dudas los que mayor caída sufrieron en los últimos años, dejando decenas de industrias cerradas y desempleados.
Impuesto al dólar: no incluye Netflix y Spotify entre otros
A medida que transcurren los días, se conocen detalles de los alcances del impuesto del 30% a las operaciones con moneda extranjera. En el caso del dólar, según la reglamentación conocida ayer, quedaron exceptuados: la adquisición de pasajes por vía terrestre con destino a países limítrofes; gastos referidos a prestaciones de salud; compra de medicamentos; adquisición de libros en cualquier formato; utilización de plataformas educativas; software con fines educativos; gastos asociados a proyectos de investigación, desarrollados por investigadores en el ámbito del Estado, universidades e instituciones que integran el sistema universitario argentino; cuando el pago de las operaciones se realiza en dólares o con moneda extranjera si se utiliza la que uno ya tiene.
El Gobierno también redujo ayer del 30% al 8% el recargo sobre los pagos en dólares para Netflix, Spotify, Airbnb, Tinder y otras plataformas. Sumó en el alivio a la contratación de servidores de Internet y demás servicios vinculados con el mundo web.
Empatía impositiva
El “refresh” en la conducción de Rentas de Misiones, con la salida de Miguel Thomas y la llegada del joven Rodrigo Vivar, pretende algo más que un cambio generacional. La orden del gobernador Herrera Ahuad es devolver la cercanía, a un organismo carente de empatía y cerrado con los contribuyentes.
En ese sentido, se anunció antes de Navidad la llegada de una amplia moratoria. El plan prevé una refinanciación en 36 cuotas. Las primeras 12 serán sin intereses y si el plazo es mayor a un año tendrá 1% adicional mensual. Estará vigente hasta el 30 de abril de 2020 y sólo se podrá adherir online. Asimismo, se reducirá el interés de la deuda hasta un 95% y las multas en un 100%. La Provincia busca hacerse de unos $600 millones por este mecanismo.