Jessica López Miño (45) es rosarina, artista plástica y creadora del personaje la “Hormiguita Viajera”, a quien decidió recrear en un viaje que realiza en bicicleta con su perrita Lisa (9). Hace más de un mes llegó a Misiones, según sus dichos se encontró con personas muy solidarias que le abrieron las puertas de sus casas.
“Después de ser tres años mochilera y sufrir mucho por no poder llevar a Lisa conmigo, proyecté este viaje y dije la debo llevar. Así que compré el carrito que adapté a la bicicleta”, relató por un lado, mientras que sobre la motivación que la lleva a semejante odisea confesó que se trata de recrear al personaje que creó.
“Ella va contando, a través de cuentos infantiles, la cantidad de historias hermosas que surgen en el viaje. A futuro será un libro”, agregó.
De Rosario a Virasoro, Corrientes. Luego Leandro N. Alem, donde permaneció un mes y ahora está en Oberá. “La energía me va llevando y las oportunidades que aparecen. Llegué a Oberá y me contaron que habrá una Expo Feria Infanto Juvenil y me invitaron a estar, así que me debo quedar acá”.
Valentía, espíritu aventurero, confianza, son algunos de los sentimientos que la guían. “Estoy tan segura de esto que estoy haciendo que jamás sentí temor. Siempre me sentí protegida y me cruzo con muy buena gente que pasan a formar parte de mi vida. Estoy en contacto con biciviajeros. Creo que tenemos muchos prejuicios que nos limitan, me encontré con gente sorprendente. Además Lisa viene re bien, la veo feliz, claro que descansamos, la idea es no agotarnos. Estuve acampando en el Berrondo y ahí surgió la oferta de un departamento para estar más cómoda que aceptamos agradecidas”.
Asentarse en un lugar y ahí salir a buscar historias es la metodología del viaje. “Vamos a ir a Salto Encantado. Voy hasta la ruta si tenemos suerte de encontrar a alguien que nos lleve genial.Lo que más cuido es nuestra vida, no es la idea sólo recorrer en bici, si alguien nos lleva mejor. Ahora si nadie aparece vamos con la bici. Así también me dijeron que debo ir al Moconá. Salí siguiendo mi proyecto y para hacer conocer a la Hormiguita Viajera, la idea era ir hacia Brasil, pero en Misiones me encontré con muchas posibilidades, en el camino va cambiando porque mi objetivo no es conocer lugares, sino promover lo que hago. Esto es para compartir, escribo los cuentos y los dibujo. Ya tengo varios, voy viendo en el camino como los puedo compartir”, explicó.
Jessica no tiene hijos, pero sí sobrinos en quienes enfoca el proceso. “Tengo seis sobrinos, que son la base de mi proyecto, lo que hago es para ellos. Hay un abismo entre lo que pasa en las grandes ciudades y estar cerca de la gente, la naturaleza”, expresó y afirmó que el mensaje que quiere dar la Hormiguita Viajera es que hay que vivir con intensidad.
“La Hormiguita lo que quiere es que la gente sea feliz, es el mensaje que lleva a todos. Creo que cada vez hay más gente que se anima a ser lo que elige, lo que sueña. Motivar a las personas, impulsarlas a seguir lo que sienten es parte de lo que pretendo”, destacó.