Los dos implicados en el crimen de Marcelo Pereira (29), que fue perpetrado en Andresito recuperaron la libertad por falta de mérito. Se trata de un hombre de 33 años y de una joven de 28 que estaban detenidos desde el pasado domingo 17 de marzo.
Lo novedoso de la resolución, firmada por el juez de Instrucción 3 de Puerto Iguazú, Martín Brites, es que consideró, entre otros factores, que la figura que ahora les otorga el beneficio de la excarcelación a los sospechosos, es porque la mujer involucrada “terminó acuchillando a la víctima en un contexto de violencia de género”, indicaron las fuentes.
Según se pudo establecer en el marco de la investigación policial-judicial, esa madrugada entre las 6 y las 6.50, Pereira llegó de manera imprevista a la habitación donde quien era su exnovia mantenía relaciones sexuales con su amigo.
Según varios testimonios quedó probado que la relación estaba terminada entre la dueña de casa y el joven que terminó mortalmente agredido. Se supo que la víctima llegó al lugar tras recibir un llamado telefónico, según relataron sus parientes. “Estaba durmiendo tras llegar del boliche cuando lo llamaron y se fue”, dijeron sus familiares.
Debido a que no existía un vínculo entre Pereira y la joven, el caso no pudo encuadrar en la figura de “homicidio doloso agravado por la relación de pareja”, tampoco se lo pudo calificar como “exceso en la legítima defensa”, teniendo en cuenta que no hay evidencias para corroborar esa posibilidad, indicó un vocero.
La mujer, quien se autoincriminó en sede judicial, alegó haber sido agredida físicamente por Pereira, sin embargo no hallaron lesiones en ella. Tampoco hubo mérito para un sobreseimiento, debido a que está acreditada la autoría del hecho, agregó la fuente.
Teniendo en cuenta que la agresión se produjo en el domicilio de la mujer, la Justicia consideró que el hecho se produce en un “contexto de violencia de género” y que “dicha situación, de inminente peligro, motivó la reacción violenta de la mujer”, por lo que se dictó la falta de mérito a ambos involucrados.
El joven presente durante los hechos solamente dijo que “los vio forcejear”. Otro supuesto atenuante para los implicados es que trasladaron al herido al hospital y se presentaron espontáneamente en la comisaría.
En la escena se incautaron dos armas blancas, una utilizada por la joven y otra que empuñaba la víctima. La investigación continúa ya que ambos sospechosos siguen supeditados a la causa y con restricciones impuestas por la Justicia.