Carlos Wolheim, también explicó en una audiencia con todas las partes involucradas en el expediente, que Skeppstedt presentaba una lesión en la boca, provocada por un impacto que le habría causado la pérdida temporal del conocimiento y que este instante correspondería con la caída de espaldas y el golpe que le provocó múltiples fracturas en el cráneo, desde el hueso occipital hasta los dos parietales, inclusive hasta el eje del cuerpo.
La explicación fue solicitada, tal como lo adelantó PRIMERA EDICIÓN la semana pasada, por la magistrada mencionada quien busca determinar con el menor margen de error posible la causa de la muerte del Skeppstedt y establecer, entre otros puntos procesales, la imputación que le correspondería al joven de 28 años y detenido por este hecho.
Cabe señalar que el informe preliminar de la autopsia determinó que el deceso fue “vinculante con una causa violenta”.
“Se produjo como consecuencia de un traumatismo de cráneo grave, hematoma subdural grave, hematoma epidural, hemorragia subracnoidea, contusión hemorrágica cerebral, edema cerebral difuso, lesiones que en su conjunto ocasionaron una depresión del sensorio con su consecuente cese de las funciones vitales, paro cadiorrespiratorio y posterior óbito”.
El viernes 28 de junio al mediodía, en el centro de Eldorado, Skeppstedt murió frente al Juzgado de la calle Lavalle, presuntamente tras ser increpado y golpeado por el exnovio de su hija de 24 años, a quien habría amenazado previamente a través de mensajes de texto.
Pocas horas después del hecho, el señalado fue detenido en una propiedad de su progenitora en la vecina localidad de 9 de Julio. Permanece bajo arresto e imputado de “homicidio simple”.