Todo llega para el que sabe esperar. Ayer lo reafirmó el joven piloto Esequiel Gómez, quien se quedó en la última vuelta con la cuarta fecha del Campeonato Argentino de Superbike, que se corrió ayer en Concordia, y logró así su primer triunfo de la temporada y en la categoría Junior Cup 250 cc.
En tanto, entre los otros pilotos del equipo de competición misionero Rosamonte Racing Team se destacó el tercer puesto que conquistó el cordobés Luciano Ribodino en Superbike, la categoría madre. Además, Nahuel Santamaría, que el sábado había marcado la pole position en la R3 Cup, marchaba como líder en la final pero sufrió una caída y debió retirarse de la prueba.
La gran alegría para el team de la tierra colorada fue la que entregó Ese, quien tuvo que llevar adelante una carrera de mucho trabajo, en virtud de que largó en la quinta posición tras una caída que lo complicó en la clasificación del sábado en suelo entrerriano.
Sin embargo, ayer, coronó una buena largada y pudo avanzar en las posiciones. El final fue no apto para cardíacos: Gómez arribó a la última curva en la segunda posición y fue en ese sector del trazado donde logró arrebatarle el liderazgo a Tomás Acevedo, quien luego sufrió un despiste y terminó cuarto. La bandera a cuadros recibió entonces por primera vez a Esequiel en lo que va del año.
“Se trató de una carrera muy pensante, en la que trabajamos mucho en lo que tiene que ver con la estrategia, y la verdad que al margen de todo eso, la suerte nos acompañó. Fue una competencia ajustada que se definió en la última curva, por fortuna todo salió bien para nosotros desde el principio”, especificó a EL DEPORTIVO el piloto apostoleño, quien agregó que “necesitaba del triunfo” para no perder pisada en la lucha por el campeonato de la categoría.
La presencia del Rosamonte también se hizo notar en Superbike, la máxima divisional nacional, donde el cordobés Ribodino se subió al podio. Si bien el objetivo era quedarse con la primera posición tras largar segundo, justamente los primeros minutos de carrera no fueron buenos y luego no pudo en una encarnizada lucha con Juan Solorza, pleito que generó emoción ante los entrerrianos. “La carrera no se dio como esperaba, tuve un toque y me puse de costado. Después hubo mucho gasto de neumático para poder descontarle a Solorza. Debí conformarme con el segundo lugar, pero en la próxima buscaré revancha”, sentenció el experimentado motociclista.
Finalmente, en la R3 Cup, el oriundo de Alem, Nahuel Santamaría, había marcado la pole el sábado y ayer se mantenía como líder de la final, pero sufrió una caída (por fortuna, sin lesiones) en plena definición por la que no pudo continuar y debió resignar el sueño de un nuevo triunfo. En la 600 Super Sport, el chaqueño Sebastián Salom, también del Rosamonte, finalizó octavo.