El recorte en planes de viviendas nacionales y la caída de la obra pública genera preocupación en el sector forestoindustrial de la provincia.
Es que desde la Asociación de Productores, Industriales y Comerciantes Forestales de Misiones y de Corrientes (APICOFOM) esperan con gran expectativa la inauguración de la primera fábrica de casas de maderas en el Parque Industrial de Posadas, que -según anticiparon- “significará la creación de 2.500 empleos y permitirá la construcción de 5.000 viviendas por año”. Sin embargo, estas proyecciones podrían verse en jaque ante la parálisis de la obra pública nacional.
“Seguimos trabajando con muchas ilusiones por la fábrica, pero estamos preocupados porque las instalaciones requirieron una inversión de 10 millones de dólares y eso implica que debemos tener una continuidad en los trabajos con el tiempo”, reveló a PRIMERA EDICIÓN el secretario de la APICOFOM, Guillermo Fachinello.
Esto, según advirtió, “no se está logrando con la Nación, porque a pesar de que hubo muchos anuncios, no se implementó ningún plan de viviendas. Hasta ahora sólo trabajamos con la Provincia”, aseveró el maderero.
En consecuencia, manifestó que reclaman el cumplimiento del convenio firmado con la Nación hace más de un año, por el cual se aseguró que el 10% de las obras para viviendas públicas iban a ser de madera.
“Las PyME están muy complicadas tras la caída de todos los planes de viviendas y con las altas tasas de créditos. Vamos a ver qué ocurre con las nuevas medidas, pero hasta ahora no han impactado en nada”, sostuvo.
Contó también que la fábrica de casas de madera ya fue comprada en Alemania y se espera que pueda entrar en funciones en marzo de 2019. “Ya posee capacidad como para comenzar a trabajar en algunos pedidos”, expresó.
A todo esto, la gerente de APICOFOM, María Cristina Ryndycz, reconoció que la mayor preocupación es que este convenio suscrito con la Nación se pueda concretar de a poco. En este momento se necesita trabajo, planteamos la necesidad de llevar adelante nuevas obras de viviendas”, consideró.
Promesas
El 26 de septiembre de 2017, el Gobierno nacional firmó un acuerdo con representantes de la industria maderera, mediante el cual se estableció que el 10% de las viviendas sociales financiadas por el Estado serían construidas en base a este material. Con esta iniciativa se esperaba generar más de 200 mil puestos de trabajo.
Sin embargo, el Presupuesto nacional para el próximo año prevé una reducción de casi 18 mil millones de pesos (en términos reales) en las partidas destinadas a Vivienda y Desarrollo Urbano.
Ante este panorama, Fachinello señaló que el sector está aguantando y que, si bien “todavía no hubo despidos”, sí tuvieron que reducir las horas de trabajo.
“La mano de obra que tenemos es calificada porque muchos aserraderos de Misiones están tecnificados, entonces no se puede despedir. Sí hubo reducción de obras de trabajo. Los corralones, por ejemplo, tienen muchos problemas por la caída de la obra pública”, sentenció.
Exportaciones
Otra cuestión que urge al sector forestoindustrial es la inauguración del Puerto de Posadas. Tras la suba del dólar, los exportadores esperan mayores ganancias, sin embargo estas no han sido las esperadas debido a los altos costos de logística.
“El Puerto de Posadas es fundamental para achicar los gastos de la exportación. . El Gobierno provincial está avanzando en esto, pero no hay nada concreto. Necesitamos que funcione cuanto antes para poder exportar”, señaló Ryndycz. Y apuntó que “por ahora se están mandando los envíos por el Puerto de Corrientes, que sale más caro que el de Buenos Aires”.
Al respecto, Fachinello añadió que “urge que comience a operar la terminal portuaria en Posadas para aprovechar el buen momento. Estamos con los números justos y nos traba mucho el tema del flete. Nuestros costos son muy altos porque estamos alejados de todos los puertos importantes”, explicó.
Por su parte, desde el Ministerio de Industria de Misiones indicaron que pretenden avanzar en un mecanismo de adjudicación directa para agilizar la apertura del puerto.
“No tenemos tiempo de esperar otra licitación, ya tuvimos dos y los resultados no fueron los deseados. No podemos esperar otro año y medio, que es el proceso legal. Estamos buscando otras alternativas, como tratar de contratar nosotros el servicio con empresas especializadas y de experiencia. Una especie de adjudicación directa, a través de una concesión por varios años”, contó el ministro de Industria, Luis Lichowski.