Las 23 familias instaladas de forma irregular desde el domingo en un espacio verde de propiedad municipal en el barrio Villa Stemberg impidieron ayer que trabajadores municipales ingresen al predio para desmantelar una casa existente en el lugar, según informó el medio local Meridiano 55.
Esa vivienda, aparentemente construida por la propia Comuna, con materiales y máquinas municipales, se considera como el “disparador” de la intrusión por parte de los ocupantes ilegales, que reclaman “igual derecho para todos”.
Ante esta situación, el Ejecutivo obereño dijo estar “averiguando el hecho” con asuntos jurídicos y en paralelo, durante la mañana de ayer ordenó desmantelar la vivienda en cuestión.
Sin embargo, los intrusos no permitieron el ingreso de los trabajadores municipales y advirtieron que “sólo podrán hacerlo cuando nos den respuestas o el intendente se apersone a hablar con nosotros”, según expresó a Meridiano 55 uno de los voceros de las familias, Esteban Omeñuk.
“No hemos atacado a nadie, no recibimos ayuda de nadie ni la pedimos, sólo queremos una tierra para levantar nuestras casas porque no podemos pagar más alquiler. Nadie más de la Municipalidad vino desde el lunes”, insistió el hombre.