Mientras que la petrolera estatal prevé cobrar las naftas según la zona y la demanda, desde la Cesane indicaron que cualquier distorsión en los valores de los combustibles afectará a las zonas de transición, tal como ocurre con el ITC en Posadas y Clorinda. 
La posibilidad de un cambio en el esquema de comercialización de combustibles por parte de la petrolera estatal YPF, acrecentaría las asimetrías internas y en el peor de los casos derivaría en el cierre de surtidores.
Es que según trascendió en medios nacionales, los precios al público de estos productos podrían variar según la zona de venta, la demanda, la disponibilidad de los productos e, incluso, el horario.
Al respecto, el presidente de la Cámara de Estaciones de Servicios del Nordeste (Cesane), Faruk Jalaf, indicó que si bien por lo pronto no hay ninguna información oficial al respecto, estas variaciones generarían asimetrías y cierres en los lugares de transición.
Es sabido que en los lugares próximos a los encuentros de las estaciones que tienen beneficios, no se vende. Por ahora son situaciones puntuales como en el caso de las ciudades donde rige el beneficio para el ITC (Impuesto a la Transferencia de los Combustible) como Posadas y Clorinda; y en Buenos Aires donde están diferenciados los precios, pero son situaciones puntuales, explicó al respecto.
Indicó que en este momento, los propietarios de las estaciones de servicios están pasando por una situación precaria sobre todo en las localidades aledañas que carecen del descuento al ITC.
Esto trajo distorsiones en el mercado. Si la situación sigue creciendo vamos a estar en problemas y habrá cierres en la provincia, señaló.
Liberación de precios
Cabe destacar que la petrolera estatal, que controla un 55% del mercado minorista, apelará a una modalidad similar a la de sus competidoras privadas, también habilitadas para modificar el precio de venta de sus combustibles para el consumo del mercado automotor.
A todo esto, Faruk Jalaf señaló que por lo pronto no se sabe en base a qué parámetros se definirán los precios y manifestó que si bien generalmente no están de acuerdo, son decisiones comerciales y no pueden inmiscuirse.
Desde YPF dicen que se hará en base a precios, a costos y a demandas. Son variaciones en conveniencia de las petroleras, nunca con beneficios para los propietarios de las estaciones y menos para los clientes, expresó.
Y recordó que ahora los precios de los combustibles son libres en el país y remarcó que estos se deben modificar de acuerdo a la oferta y a la demanda, y de acuerdo a los precios internacionales del barril de petróleo y el dólar en la Argentina.
En este sentido, apuntó que la empresa que marca el sendero de precios siempre fue YPF y con esta nueva forma de proceder no sabemos qué puede ocurrir. No tenemos una orientación ni siquiera de cómo se va a proceder, ni qué medidas se van a tomar para disminuir o aumentar los precios, consideró.
Mientras que desde YPF indicaron que los precios internos de los combustibles básicamente están fijados por los costos, en los que incide la inflación y el valor del dólar y el precio internacional del barril. Además indicaron que el Gobierno dispuso una reducción en las cargas tributarias, a excepción del gravamen por emisiones de carbono.
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