Cuevas, cañones, mesetas, montañas, dunas, árboles extraños y aves rarísimas, playas paradisíacas y oasis maravillosos, paisajes de películas de otros mundos. ¿Lo bueno? Se encuentran en este planeta.
Lo han comparado con la mítica Pandora, o con paisajes alienígenas, aquellos de películas de ciencia ficción, pero lo cierto es que el archipiélago de Socotra, ubicado a unos 240 kilómetros al este del Cuerno de África y 380 kilómetros al sur de la Península Arábiga, es único en su tipo en la tierra y, como tal, representa un auténtico reto para los amantes del turismo de aventura, aquel que lleva al viajero a lugares indómitos pero maravillosos. Éste no es un destino para cualquiera, solo para aquellas personas que realmente sepan y quieran disfrutar de una aventura.
La isla está muy alejada, como perdida en la nada, como si hubiese aparecido ahí de repente. Es un lugar único cuya magia radica en la singularidad de sus especies, tanto vegetales como animales.
Las islas pertenecen a Yemen, aunque por su privilegiada posición en el estrecho de Adén han sido codiciadas por muchos países en su historia. Debido a su clima tropical desértico ha desarrollado una biodiversidad única en el mundo, pudiendo encontrar numerosas especies endémicas.
En concreto, aquí pueden encontrase 700 especies que no se encuentran en ninguna otra parte del mundo. Por eso, este territorio fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2008.
Más allá de la flora y la fauna, los paisajes son realmente sorprendentes. Se pueden ver montañas repletas de árboles; una costa completamente desierta de aguas cálidas y cristalinas que sorprenden con gigantescas dunas y cuevas repletas de murciélagos. Como verá, no es un destino para cualquiera, pero no podíamos dejarlo de lado, ya que es un lugar que realmente vale la pena visitar.
Lo han comparado con la mítica Pandora, o con paisajes alienígenas, aquellos de películas de ciencia ficción, pero lo cierto es que el archipiélago de Socotra, ubicado a unos 240 kilómetros al este del Cuerno de África y 380 kilómetros al sur de la Península Arábiga, es único en su tipo en la tierra y, como tal, representa un auténtico reto para los amantes del turismo de aventura, aquel que lleva al viajero a lugares indómitos pero maravillosos. Éste no es un destino para cualquiera, solo para aquellas personas que realmente sepan y quieran disfrutar de una aventura.
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