A pocos días de cumplirse dos años de la desregulación del mercado yerbatero, el panorama en el sector va de mal en peor. Al grave ataque de una plaga en las zonas yerbateras de Misiones, se suma un presente sin mejoras con el un mercado liberado y abierto a las materias primas de otros países, que como consecuencia están hundiendo cada vez más a los yerbateros misioneros.
Con esta situación, los productores analizan seriamente no comenzar la zafriña, que va de diciembre a marzo. En el sector, hay un amplio consenso al respecto, aunque también resistencia.
Jorge Skripczuk, productor de la zona centro de Misiones expuso en la FM 89.3 Santa María de las Misiones que “lamentablemente se viene cada vez peor la situación de la actividad”.
La eliminación de las facultades del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) afectó de lleno a los principales eslabones de la cadena productiva. “Los sectores que están perjudicados son el sector de la producción, el sector que hace el servicio de cosecha y las pequeñas y medianas industrias. Todo ese sector está en la misma situación”, sostuvo.
En este marco, Skripczuk explicó que dentro de los grupos de productores, la preocupación es generalizada. “Hay de todo, hay productores muy preocupados, otros que tienen todavía esperanza de que esto mejore, pero estamos cada día más complicados”, contó.
“Estamos hablando, analizando, y vamos a ver de acá a un tiempito con la movida. En principio no estamos de acuerdo con empezar la zafriña, para tratar de bajar la oferta de hoja verde”, resaltó.
Es que el panorama a futuro no pinta nada bien para los actores del sector, quienes no ven mucho interés del Gobierno nacional o la justicia federal, de cambiar de decisión. “No perdemos la esperanza, pero lo vemos muy lejos de llegar a un acuerdo o que el Gobierno retroceda en su modelo económico”, dijo el productor. “Vemos que la tendencia es monopolizar la actividad”, aseguró.
“Estamos huérfanos”
El productor describió el sentimiento del sector frente a la falta de respuestas: “Hoy más que nunca le podemos decir que estamos huérfanos, no vemos alguna señal de que podamos mejorar”, dijo.
El escenario futuro se torna “muy oscuro para el sector agropecuario, porque vemos que todas las producciones regionales están en la misma situación. Hoy ya se ven muchas chacras a la venta. El colono está prácticamente resignado y no le ve salida”, lamentó.
En este sentido, Skripczuk también advirtió que esta crisis ya desencadena un fenómeno que Misiones conoce muy bien: el éxodo del campo a las ciudades. “Eso lo venimos diciendo hace mucho tiempo, y eso se está dando. Se está dando de una manera muy acelerada. En aquellos momentos (2000, 2001, 2002) fue igual, pero más lento el proceso”, relató al recordar las épocas de mayor crisis.
Sin opciones de diversificación
En Misiones, se comenzó a mencionar mucho nuevamente las chacras diversificadas, donde los colonos no solamente tengan una materia prima sino varias, dependiendo la temporada.
En este punto, el yerbatero fue categórico: “¿Qué es lo que vamos a hacer? Acá las legumbres que se producen después las importan de otros lugares. No hay una salida segura, no hay un producto que esté valiendo hoy o pueda sustituir la yerba o el té. Queda esperar, resistir, no regalar la hoja verde”, pidió.
Por último, aclaró que la gran mayoría concuerda en no van a salir a las calles a reclamar, porque perjudican a otros trabajadores y otras actividades que no tienen nada que ver.
“Hoy más que salir a la calle, la producción está en las chacras. Es tratar de sostener eso. El productor es el dueño de la hoja verde y tenemos que tratar de resistir para que no nos lleven regalado”, cerró.








