Ignacio -a quien cariñosamente llaman Nachito– cumplió cuatro años recientemente y su familia realizó el festejo bajo la temática del “camión basurero”, donde el protagonista fue “recolector” por un día. Sucede que el pequeño está fascinado con el camión recolector y con los recolectores de residuos que, todos los días a las 11, pasan por su casa del barrio Manantial, de esta ciudad.

Su mamá, Daiana, contó que el equipo que se moviliza sobre el camión -es el mismo desde hace tiempo- “siempre lo saluda, lo festeja”, entonces la idea fue “darle valor a un trabajo que es fundamental, pero al que le restamos importancia”.
Aseguró que la actitud de su hijo les produjo “ternura” y que con su esposo, Miguel, quisieron destacar y agradecerles públicamente “por hacer un poquito más de lo que les corresponde, que es su tarea, porque siempre bajan del móvil, lo saludan, tocan bocina. Su héroe no es Messi ni Superman sino los señores del camión recolector”.
Agregó que “ellos se bajan, se sacan los guantes, lo saludan. El día que cumplió años, les acerqué unos globos y unos bombones para que le entregaran como presente. Mi hijo quedó fascinado, luego contaba a todos lo sucedido”.
Para el cumpleaños, le confeccionaron la ropa de mini recolector. “Fue una temática distinta, que no es lo que todo el mundo quiere, lo que todos los nenes eligen. Pero a él le gustó y se encariñó mucho con los señores, y a nosotros nos produjo mucha ternura”, recalcó. Cuando pasan “Nacho” y su hermana Bianca (6) “se disfrazan para recibirlos, quieren regalarles algo, y para el verano planifican servirles algún refresco” para aplacar el calor.
Contó que en la casa “tratamos de involucrar a los niños en las tareas del hogar, teniendo sus responsabilidades desde chiquitos, motivándolos con algo de dinero, para que puedan cumplir el objetivo. Concurrimos a la Iglesia Adventista y es ahí donde motivan mucho a cuidar la naturaleza, a ser amables con todos”. En una de las lecciones sabáticas “aprendían sobre los trabajos, capaz que a partir de allí le comenzó a llamar la atención a qué se dedica cada uno”, reflexionó Daiana.







