El Presidente Javier Milei vetó en su totalidad el proyecto de ley que pretendía transformar el Fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) en un mecanismo de coparticipación automática para las provincias y la Ciudad de Buenos Aires. La decisión, formalizada a través del Decreto 652/2025, devuelve la iniciativa al Congreso y defiende la facultad del Poder Ejecutivo para manejar el fondo de manera discrecional, tal como lo establece la ley vigente y la Constitución.
El veto argumenta que la ley sancionada por el Congreso desvirtuaba el propósito original de los ATN, que no es un instrumento de reparto regular de recursos, sino un fondo extraordinario diseñado para asistir a las jurisdicciones en situaciones de emergencia y desequilibrios financieros. El Gobierno sostiene que convertir el fondo en un mecanismo de distribución diaria privaría al Estado nacional de una herramienta vital para responder con agilidad ante crisis imprevistas, como desastres naturales, emergencias sanitarias o contingencias económicas.
Según el Poder Ejecutivo, el manejo discrecional del ATN es fundamental para garantizar una respuesta rápida y focalizada en aquellos lugares más afectados. Se menciona que, de convertirse en automático, el fondo podría ser utilizado para financiar gasto corriente en lugar de atender crisis, lo que comprometería la capacidad del Gobierno nacional de asistir a las provincias más necesitadas.
Además, el veto subraya que cualquier cambio de tal magnitud en el sistema de coparticipación federal debe ser resultado de un consenso entre la Nación y las provincias, no de una reforma unilateral. En este punto, el Gobierno hace referencia al Pacto de Mayo, un acuerdo con gobernadores que busca una rediscusión integral del régimen, y califica la iniciativa legislativa como un obstáculo para ese proceso de diálogo federal en curso.
Ahora, el proyecto de ley N° 27.794 deberá regresar al Congreso. Para que sea promulgado a pesar del veto presidencial, necesitará ser ratificado con una mayoría absoluta en ambas cámaras. Mientras tanto, el Fondo de Aportes del Tesoro Nacional mantendrá su régimen actual: un instrumento de emergencia de asignación exclusiva del Poder Ejecutivo.





