La Policía tomó conocimiento del hecho mediante audios de whatsapp y rápidamente se trasladó al lugar. Al llegar, los uniformados constataron que tres grupos de mujeres y menores ya habían tomado posesión de las construcciones.
El lugar está destinado a la relocalización de personas que en 2014 perdieron todo lo que tenían a causa de las inundaciones y que aún viven en precarias condiciones en un predio al costado de la ruta provincial 13.
Este asentamiento de 11 unidades habitacionales está en un 70 por ciento de construcción y a las casas les falta las conexiones de luz eléctrica y agua potable para poder concretar el traslado de sus verdaderos dueños.
Tras dar intervención a la Justicia, este martes por la mañana se realizó un operativo para desalojar a las familias del lugar, donde además se instaló una custodia policial permanente.