POSADAS. La causa que se tramita en el Juzgado Federal de esta ciudad, a cargo de Ramón Claudio Chavez, por el supuesto atentado de la Triple A contra la vida del ex gobernador Juan Manuel Irrazábal y su vice César Napoleón Ayrault anexó una sorpresiva denuncia de los familiares de las víctimas.Creen que existen pruebas suficientes para sostener que María Susana Irrazábal (única sobreviviente en el trágico suceso) habría sido asesinada en Buenos Aires para evitar que, con su testimonio, sostenga la hipótesis de la explosión del avión en el que viajaban los mandatarios desde Posadas a Puerto Iguazú el 30 de noviembre de 1973. De ser corroborado por la Justicia, se estaría frente a un segundo atentado contra las familias de los funcionarios fallecidos apuntando la investigación a la Triple A (Alianza Anticomunista Argentina), liderada por el entonces ministro de Bienestar Social de la Nación José López Rega.Así lo confirmó a PRIMERA EDICIÓN Pedro Pirovani, hijo del piloto Jorge Antonio Pirovani, fallecido en el mismo accidente, quien hace a la vez de patrocinante legal. El letrado y querellante en la causa reveló que días atrás declararon tíos de María Susana que estuvieron al cuidado de la extinta en el Hospital del Quemado de Buenos Aires. Aparecieron datos sorprendentes: hubo un pedido de autopsia sobre el cuerpo de la joven estudiante universitaria por las dudas que generaron su repentino fallecimiento, ya que tenía heridas cicatrizadas producto de las quemaduras; que no cumplió la Justicia remitiendo entonces el expediente al archivo. Y se denunció un acta de entrega del cuerpo de María Susana con una firma de Néstor Codiani (tío) que sería falsa.Pirovani anticipó que los familiares pedirían en los próximos días que se exhumen los cuerpos de Juan Manuel Irrazábal y César Ayrault “a fin de comprobar si en sus restos hay presencia de pólvora o combustible”, al haberse producido una explosión. Cabe recordar que la causa fue reactivada en 2007 y bajo la figura de “Lesa Humanidad”, no le son aplicados los plazos procesales habituales.¿Firma y acta falsa?Pedro Pirovani explicó que “María Susana Irrazábal tuvo quemaduras de segundo y tercer grado pero una semana antes de morir estaban pensando en darle el alta. Era la única que podía decir qué pasó allá arriba (en el vuelo) y la única viva. Hay testimonios en el expediente de personas que vieron explotar el avión en el aire. Así lo relató un periodista que contó dichos del entonces jefe de la comisaría de Iguazú, Abdón Fernández, funcionario que no hizo lo mismo en el sumario policial por tratarse de ‘momentos muy difíciles’ ante la supuesta presión de la Triple A”.Susana permaneció dos meses en el hospital porteño. El médico de guardia la revisó y aconsejó el 6 de febrero de 1974, a las 22, “que sería prudente una autopsia”. Sin embargo, en la comisaría porteña interviniente apareció un acta supuestamente firmada por Néstor Codiani del mismo día pero sin hora, donde le dan la autorización para retirar el cuerpo antes de la autopsia. Cuando declaró Codiani días pasados en sede judicial “negó que se tratara de su firma incluso haber estado en esa dependencia policial, por lo cual se ordenó un peritaje caligráfico que esta en proceso”.Antes de morir, según el testimonio judicial de la tía de Irrazábal, la joven María Susana en al menos dos oportunidades le manifestó: “Explotó el avión en el aire. Lo único que me acuerdo es que tengo el grito de mamá que me dice ‘salvate Cuca’”.La querella solicitaría además la declaración del ex secretario de la Gobernación, Jorge Yamaguchi, quien figura en el expediente como el único funcionario misionero presente en el Hospital del Quemado en aquel entonces. Y además habría tenido a su cargo la Dirección de Aeronáutica que permitió viajar a gobernador y vice juntos en un avión, al que Pirovani padre habría cuestionado ese 30 de noviembre por mal funcionamiento, según el testimonio de José María Chas, hijo del responsable de la provisión de combustible a las aeronaves en Posadas.Pirovani hijo, en base al testimonio de personas del entorno más cercano al fallecido gobernador, logró saber que dos meses antes de la tragedia, en una reunión realizada en Capital Federal, el presidente Perón le habría ofrecido un cargo nacional a Irrazábal que éste desestimó.Pero a los pocos días de esa reunión el misionero llevó una carpeta con documentación denunciando contrabandos de soja y harina, entre otros; y algunas medidas políticas que pretendía aplicar. Perón ya no lo atendió y lo derivó a terceras líneas. Semanas después ocurrió la muerte del gobernador y vice.Pedro Pirovani apunta además a la responsabilidad del estado nacional “como autor intelectual a través de la Triple A, ya que López Rega tenía su base en Bienestar Social. Y a la provincia le cabe responsabilidad por acción u omisión porque la Justicia armó un expediente judicial ‘trucho’ cuando no era su jurisdicción pero que permitió con un informe sin firma de la Fuerza Aérea archivar las actuaciones”. Según Pirovani, “lo mismo habría hecho Yamaguchi, que sin mostrar el informe a los familiares de los mandatarios misioneros fallecidos colocó un sello para archivo y posterior destrucción de las actuaciones, que logramos por suerte copiar antes de su destrucción” años atrás. “La justicia es lenta, sino, llega la Divina”, concluyó Pirovani. &nb
sp;





Discussion about this post