CANDELARIA. Un sujeto acusado de abusar de su pequeña hija de cuatro años fue detenido por la policía y tras permanecer varios días prófugo. Tal como publicó este Diario, los uniformados tomaron conocimiento del aberrante caso a principios de este mes, cuando se presentó ante la comisaría de Candelaria una mujer de 43 años, quien denunció que su hija menor había sido abusada por el padre biológico. Los investigadores locales se comunicaron de inmediato con sus pares de la Policía Nacional de Paraguay, ante la presunción de que el sujeto se habría fugado hacia ese país, de donde es oriundo y tendría familiares que le habrían facilitado seguir huyendo de la Justicia. Sin embargo, no fue hallado en la residencia de sus parientes, por lo que los policías centraron su búsqueda en otras zonas cercanas a Candelaria. Finalmente, los efectivos dieron con el fugitivo, alrededor de las 21 del pasado martes. Fue ubicado en el barrio Las Rosas de la localidad de Santa Ana. El septuagenario fue detenido en averiguación de un hecho de “abuso contra la integridad sexual con acceso carnal agravado por el vínculo”. Por orden judicial permanece alojado en la seccional Décimocuarta y a disposición del citado Juzgado.En base la denuncia se supo que el sospechoso habría vejado a la criatura durante una visita que tuvo a principios de este mes en la vivienda de su ex concubina, con quien tiene dos hijos en común, la víctima y un varón de siete años. Según la madre de la nena, hacía un mes su pequeña hija había manifestado dolor en la zona genital, manifestando que su padre había abusado de ella, y al revisarla la madre observó signos de un presunto abuso sexual por lo que echó a su esposo del domicilio, en el barrio San Cayetano de Candelaria. Sin embargo, en la mañana del pasado viernes 7 de septiembre, la denunciante dijo que despertó con el llanto de su hija, quien le contó que su “progenior”, había vuelto a abusar de ella. Cuando revisó la habitación encontró al presunto depravado oculto, detrás de unas cortinas, en el interior de su vivienda, por lo cual volvió a echarlo de la casa. Luego radicó la correspondiente denuncia. Un médico policial constató que la menor presentaba signos de abuso sexual.
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