GARUPÁ. “Allaité”, un salón campestre construido totalmente en madera artesanal, será presentado en sociedad mañana por los integrantes de la familia Dilger, quienes se ocuparon del diseño, la construcción, decoración e iluminación del “quincho gigante”. Este emprendimiento, que tiene capacidad para 250 personas dentro del salón o para alrededor de 400 si se utiliza el parque arbolado de dos hectáreas, está ubicado en el barrio Don Fernando, paraje Santa Inés, municipio de Garupá. Guillermo Dilger, su propietario, explicó que la idea nació hace diez años, cuando empezó a juntar madera sin valor comercial, después de hacer un trabajo “de hormiga” y de un “esfuerzo familiar muy grande, logramos concretar el sueño”. Contó que su hijo Lucas, que es ingeniero civil, realizó un diseño “con lo que había, porque muchas veces se diseña y no se encuentra la pieza que encastre en el proyecto. Construimos algo rústico con madera reciclada, para mostrar que se puede otorgar valor agregado a lo que la gente tira. No toda la madera tiene que ser cuadrada, cilíndrica o perfectamente sana y brillante. Con un poco de gusto y criterio se puede hacer todo y creo que el límite de su uso es la imaginación”. Como técnico forestal, “siempre me gustó todo lo relacionado a la madera y cuando más natural, mejor”, dijo Dilger, quien mencionó a su esposa, Mirta Isabel Trinidad, y a su hija, Liz Rebeca, que se desempeña como chef, como pilares fundamentales del proyecto que se inaugurará mañana. “Allaité” es un espacio de 20 por 14 pensado para casamientos, cumpleaños y reuniones. “Es un lugar abierto, con cerramiento de cortinas eléctricas, aunque la idea es que el visitante disfrute de la naturaleza, observando los árboles y oyendo el canto de los pájaros. Por sus características, es único en la provincia”. Un lugar únicoEl salón posee todas las comodidades: parrilla multifuncional, cocina, cámara frigorífica, un lugar para hacer locro, asado a la estaca, horno de barro para pan casero, empanadas, pollo o pernil. “El propósito es, un poco, recuperar nuestras tradiciones, las costumbres que perdimos. Por eso en cada fecha patria vamos a realizar un evento específico”, acotó. Mañana festejarán el cumpleaños de la Patria con empanadas, parrillada, asado a la estaca, vino tinto, pastelitos y la animación de los Hermanos Nuñez, que cumplen veinte años con la música, porque “la idea es comer algo, escuchar buena música y compartir en familia, ya que el predio posee estacionamiento y espacio de esparcimiento para los chicos, que pueden disfrutar de un día de campo, al aire libre y revolcarse en el pasto si es que así lo desean”. Dilger anticipó que el 9 de Julio habrá un “gran locro”, amenizado por la música de los Hermanos Acuña, de Eldorado. La modalidad se repetirá en las fechas patrias, con venta de tarjetas anticipadas a fin de programar con precisión. Queremos brindar un servicio, no sé si diferente, pero que se destaque por la excelencia”, sostuvo.
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