LA PAZ, Bolivia (AFP y Agencias). El Gobierno enfrenta un fuerte embate de los movimientos sociales, con un paro de 48 horas del transporte que comenzó el lunes y una huelga general de tres días convocada por la central obrera (COB) desde hoy.La huelga de choferes -que se opone a la vigencia de una ley municipal que reglamenta el transporte y tránsito urbano de La Paz- paralizó desde el lunes completamente a la ciudad, con episodios esporádicos de choques con usuarios que se desplazaron a pie a sus centros de trabajo. “El paro es un rotundo éxito. Hemos dicho a nuestros compañeros que el problema es de todos, por eso es contundente”, evaluó René Vargas, secretario ejecutivo del sindicato de choferes de La Paz. Los choferes rechazan que la nueva legislación -aprobada por el municipio- regule las rutas, paradas y horarios de servicio, además de obligarles a cumplir las normas de circulación y llevar puesto el cinturón de seguridad, entre otros requerimientos.DerivacionesDebido a la contundencia de la protesta, el Gobierno se vio obligado a suspender las clases y a dictar tolerancia y horario continuo en las actividades laborales. Los empleados retornaban a sus domicilios al caer la tarde a pie, debido a la drasticidad de la huelga que mantenía incólume el bloqueo de calles con sus propios buses o taxis.Santa Cruz, Cochabamba y Tarija no fueron al paro, dado que la ley municipal sólo alcanza a La Paz, pero en solidaridad, los sindicatos de otras seis ciudades acataron la medida de protesta.
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