La niña embarazada testimonia en cámara Gesell

ELDORADO. La menor de once años embarazada después de haber sido violada declarará hoy ante la Justicia por medio de una Cámara Gesell que se realizará en la ciudad de Posadas.Así lo confirmaron fuentes de confianza a este medio, quienes aseguraron que en el procedimiento, además de los especialistas del Cuerpo Médico Forense, estaría presente el magistrado Horacio Saldaña, titular del Juzgado de Instrucción 1 de la Tercera Circunscripción Judicial.En tanto, trascendió ayer que el caso que investiga el abuso no tiene detenidos, al contrario de lo que había trascendido en un principio.Como PRIMERA EDICIÓN informó en exclusiva en su edición del sábado, se confirmó que una menor de apenas once años había sido víctima de abuso sexual con acceso carnal, hecho por el que actualmente cursa un embarazo de ocho meses.Según consta en la instrucción, la niña-madre habría asegurado en un principio que fue sometida por un supuesto vecino que la había interceptado camino a la escuela. La denuncia fue radicada el 16 de enero en la Comisaría de la Mujer de la Unidad Regional III, por el padrastro de la menor.El hombre contó, en base a lo expresado supuestamente por su hija, que el depravado habría vendado los ojos de la víctima y conducido a una vivienda deshabitada.Allí, siempre al decir del relato en sede policial, la habría atado y accedido carnalmente.El denunciante dio la identidad del supuesto abusador, quien a posteriori se presentó en sede policial acompañado de su abogado y negó su participación en el hecho.Es más, pidió que le extraigan sangre, en forma urgente, para someterse a la prueba de ADN y así desechar cualquier vínculo filiar.En este contexto, el juez dispuso que el sospechoso siguiera en libertad a la espera de otras pruebas a realizarse.  La Justicia tiene cifradas esperanzas de llegar al fondo de la cuestión a través de la Cámara Gesell, que podría verter nuevos elementos de prueba para establecer de manera fehaciente los pormenores del hecho. En este sentido, los investigadores señalaron que hay muchos puntos poco claros en la versión dada por el padrastro.Entre otras cuestiones, consideran poco probable que alguien pudiera vendar los ojos a una criatura en la vía pública sin despertar sospechas. Por esta razón, tampoco se descarta que la víctima pudiera haber sido inducida a contar una versión diferente a la verdadera.Mientras tanto, los uniformados continúan con la correspondiente investigación al respecto, concluyó el portavoz del caso.