25 DE MAYO. Un joven que en los próximos días debía ser intervenido quirúrgicamente por un problema físico fue salvajemente agredido por tres individuos en las puertas de su casa, en esta localidad.Su padre, que dormía, escuchó los gritos de auxilio y alcanzó a rescatarlo cuando el peligroso trío lo golpeaba en la cabeza con una piedra, luego de bajarlo por la fuerza del vehículo que conducía.El episodio ocurrió en la mañana de ayer en 25 de Mayo, donde los vecinos se mostraron cansados de los violentos jóvenes, que tendrían antecedentes por hechos similares y que hasta anoche no habían podido ser apresados por efectivos policiales.Incluso, una fuente comentó a este medio que uno de los agresores sería familiar directo de un importante funcionario del Ministerio de Educación con injerencia en la Zona Centro de la provincia, razón por la que -según los vecinos- “aprovecha” las influencias para satisfacer su violento instinto.Con respecto al hecho en sí, trascendió que ocurrió alrededor de las 6 de ayer, cuando la víctima -de unos veinte años- volvía de un baile a su casa, a pocos metros de la comisaría local, a bordo de una camioneta.Al parecer, el muchacho tuvo un altercado en esa fiesta con tres jóvenes que también son oriundos de 25 de Mayo, pero que estudian en Posadas, cuyas edades oscilan entre los 20 y 22 años, detallaron.Fue entonces que el joven decidió evitar cualquier disputa y volver a casa, pero cuando abrió el portón de la vivienda los tres forajidos lo interceptaron.Luego de algunas amenazas, el trío de irascibles comenzó a atacar salvajemente con golpes de puño y patadas al indefenso muchacho, hasta que uno de ellos tomó una piedra de importantes dimensiones y arremetió con golpes en la cabeza.En medio de la situación la víctima comenzó a pedir auxilio. Así fue que el padre, que dormía en una de las habitaciones de la casa, escuchó los gritos, salió a la calle y se encontró con la tremenda escena. Entonces, los violentos emprendieron la retirada a la carrera.“Si el padre no lo salvaba, podían haberlo matado”, reflexionó un vecino del pueblo, quien aseguró también que en la localidad todos están “cansados” de los mismos jóvenes, a los que consideran “pelientos” y que generan inconvenientes prácticamente todos los fines de semana.Afortunadamente, la víctima no sufrió fracturas, aunque la preocupación de la familia residía ahora en que no haya sufrido daños internos, ya que el muchacho debe ser sometido el viernes a una intervención quirúrgica en Buenos Aires por un problema físico.Efectivos de la comisaría local intentaban dar con el paradero de los tres agresores, que serían conocidos en la zona y contarían con antecedentes por hechos similares.
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