Ambos tienen 21 años y fueron los primeros en ser apresados tras la muerte del empresario. La Justicia debe definir la situación de Manolito (22). El único con prisión preventiva es un joven de 28 años. Los dos jóvenes involucrados en el crimen del empresario Bladimiro Pizl (74), quienes habían sido excarcelados en abril pasado, finalmente recibieron en las últimas horas la falta de mérito, razón por la que la situación procesal de ambos quedó claramente aliviada, aunque aún permanecen ligados a la pesquisa.
Así lo pudo saber PRIMERA EDICIÓN en base a sus fuentes, quienes indicaron que la magistrada Selva Raquel Zuetta, titular del Juzgado de Instrucción 5 de Alem, no encontró elementos de peso en contra de los dos excarcelados, ambos de 21 años. No obstante aquello, ambos continuarán bajo la lupa de la Justicia. Si el panorama no cambia, el dúo podría ser sobreseído.
Mientras tanto, se supo que Zuetta analiza ahora la situación de Manolito (22), el joven detenido semanas atrás luego de permanecer 114 días prófugo de las autoridades. En un principio se habló de que ese acusado podría tener clara vinculación con el homicidio, algo que ahora es materia de análisis por parte de la magistrada.
Ese joven permanece detenido junto a otro de 28, el único que por el momento recibió la prisión preventiva, en razón de los elementos que pesan sobre sus espaldas. Sucede que en sus manos, las autoridades encontraron el teléfono celular de Pizl, aparato que ahora es materia de investigación por parte de la Secretaría de Apoyo para Investigaciones Complejas (SAIC) del Poder Judicial.
Tal como lo publicó PRIMERA EDICIÓN en su edición del miércoles 30 de mayo, a ese acusado le cabe por el momento una imputación bajo la carátula de homicidio en ocasión de robo, delito que prevé una pena de entre 10 y 25 años de cárcel.
Por el momento, la jueza considera que ese joven actuó solo, en razón de testimonios e indicios como los mensajes que se cree envió desde el teléfono celular de la víctima. Todo es materia de investigación.
La principal hipótesis sobre lo sucedido apunta a que alrededor de las 12.30 del sábado 27 de enero Pizl llegaba a uno de sus campos, emplazado a unos 1.500 metros de la ruta provincial 4 y a cinco kilómetros de la zona urbana de Bonpland. El empresario aparentemente se bajó de su camioneta Ford Ranger para abrir el portón de la chacra cuando fue sorprendido por el o los autores del hecho.
Los maleantes lo atacaron a golpes en la cabeza. Escaparon con el celular de Pizl y alrededor de 7 mil pesos que el hombre llevaba para la paga semanal de sus empleados. Ese dato, se supone, era conocido por los criminales, que atacaron en busca del dinero.
En un principio fueron detenidos los dos jóvenes que ahora recibieron la falta de mérito. Más tarde cayó el joven sobre el que pesa una preventiva, mientras que el último en ser detenido fue Manolito, cuyo futuro procesal aún es incierto pero podría conocerse en las próximas horas.
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