La víctima tiene cuatro años. La madre dijo que lo cepilló con una “sustancia blanca y extraña para aliviarle las molestias. El niño convulsionó y fue hospitalizado. El caso se registró el jueves a la madrugada en el populoso barrio A-4 de Posadas.Por lo general las madres no dudan en dar su propia vida por un hijo. El instinto maternal incluso se encuentra en mujeres que son mamás del corazón y cuidan como propios a hijos adoptivos.
Por ello, resultan incomprensibles ciertos casos donde algunas personas cometen actos propios de una película de terror. Factores como la ignorancia y la irresponsabilidad fueron de la mano en un reciente hecho ocurrido en esta ciudad, donde una joven de 23 años terminó detenida por cepillarle los dientes a su hijo de cuatro años con cocaína y con la intención de aliviarle el dolor de muelas.
Muy lejos de funcionar como un analgésico contra esa molestia, la droga le provocó fuertes convulsiones al indefenso pequeño.
Tanto que la progenitora tuvo que trasladar al chiquito hasta el CAPS de su barrio, en este caso de la populosa zona del A-4, al sur de la capital provincial. Eran las 2 de la madrugada del pasado jueves.
Desde ese centro asistencial tuvieron que derivar al paciente al hospital de Pediatría, debido a que no mejoraba su estado de salud.
Una vez en dicho nosocomio los médicos asistieron al menor y lograron estabilizarlo, hasta que dejó de convulsionar.
La madre le habría dicho a los facultativos que su hijo se puso mal luego de que le cepilló los dientes con una sustancia blanca y extraña y que desconocía de qué producto se trataba.
Es decir que la involucrada no le dijo toda la verdad a los médicos. No obstante, al realizarle un lavado de estómago al chico y del análisis toxicológico posterior surgió que se trataba de clorhidrato de cocaína, precisó una fuente oficial.
Exámenes médicos
El menor quedó internado en observación durante un tiempo breve para estudios complementarios, teniendo en cuenta que por fortuna se recuperó de los efectos de la ingesta del estupefaciente.
Conforme el diagnóstico médico oficial al que tuvo acceso PRIMERA EDICIÓN, al cabo de unas horas el menor se encontraba sin convulsionar, lúcido en tiempo y espacio, sin pérdida de conocimiento y sin insuficiencias cardíacas. Tras conocerse los resultados de los exámenes los facultativos le dieron el alta al pequeño paciente.
Entonces la involucrada regresó a su domicilio. Sin embargo, la Policía ya estaba al tanto de lo sucedido.
La orden judicial
Por la corta edad del involucrado, los uniformados informaron del lamentable episodio a la Defensoría de Menores en turno. No obstante, la orden de detención a la mujer fue emanada desde el Juzgado de Instrucción.
Personal de la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional X (con la colaboración de efectivos de la comisaría Decimoprimera), con asiento en Posadas, concretaron dicha orden ese mismo jueves a las 20.15.
En tanto y en forma provisoria, el menor quedó al cuidado de su abuela, quien reside en el mismo barrio.
Por otra parte anoche era inminente el allanamiento en la vivienda de la sospechosa.
¿Tentativa de homicidio o lesiones?
Por estas horas aún no había llegado el sumario judicial al Juzgado de Instrucción 2, a cargo del magistrado César Yaya, en turno al momento del hecho.
Según pudo averiguar este Diario, había algunas dudas desde la investigación para determinar la calificación legal del caso por el cual una mujer le suministró cocaína a su hijo para el dolor de muelas.
Si bien el chico terminó lesionado, es decir que tuvo convulsiones y pudo morir a raíz de la ingesta de la droga, para muchos también surgió la posibilidad de calificar el hecho como tentativa de homicidio, según explicaron las fuentes consultadas.
No obstante, no estaría debidamente probado que la mujer intentó quitarle la vida a su propio hijo, ya sea en forma intencional o por negligencia, agregó un vocero del caso. Según ella misma habría manifestado, al darle el estupefaciente al pequeño creyó poder calmar su dolor de muelas.
Se cree que desde la Justicia, y con cautela, podrían inclinarse por una acusación de lesiones en forma preventiva y mientras el caso siga en fase investigativa.
El próximo lunes la acusada deberá comparecer ante el citado juez, donde puede declarar y dar su versión de los hechos o abstenerse, haciendo uso de sus derechos institucionales.
Por el momento y hasta que se resuelva su situación procesal continuará alojada en una cárcel de mujeres.
Discussion about this post