Productores yerbateros que responden a la Federación Agraria iniciaron ayer una nueva jornada de protesta frenando el transporte de materia prima y elaborada por las rutas 12 y 14, con piquetes en los cruces Filadelfia y Cuay. Mientras, las demás asociaciones (especialmente las del centro y Norte de Misiones) decidieron continuar en “la mesa” propuesta por el gobierno provincial para insistir con las negociaciones en torno a los reclamos del sector, en uno de los peores momentos de la producción. En este clima conflictivo asumió ayer Alberto Re al frente del Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym), confirmándose así el nombre anunciado que sin embargo retrasaba su arribo al organismo nacional que regula la actividad yerbatera. Paralelamente a la asunción de Re en reemplazo de Luis Prietto, el gobierno nacional oficializó el Convenio suscripto entre el Ministerio de Agroindustria de la Nación y el Banco de la Nación Argentina para efectivizar una línea de crédito de $ 300 millones destinada al financiamiento de la cosecha. Para formalizar el acto estuvo en Posadas el Subsecretario de Agricultura de la Nación, Luis Urriza. El Convenio estará destinado a la micro, pequeña y mediana empresa. Con los fondos dispuestos se financiarán inversiones para capital de trabajo y descuentos de cheques de pago diferido. El Ministerio aportará así seis puntos porcentuales de tasa de interés.El funcionario nacional también dio a conocer otro convenio entre el Ministerio de Agroindustria y la Provincia de Misiones, que aportarán quince millones de pesos respectivamente para garantizar créditos a pequeños secaderos de yerba mate, cooperativos y privados. Con esos treinta millones que serán otorgados a través del Banco Macro SA (el Inym absorberá la tasa de interés) esperan asegurar que paguen al contado el precio de la hoja verde de yerba mate a los pequeños productores, hecho que hasta ahora no se dio desde el inicio de la cosecha. Pero ninguna de estas medidas sirvió para aplacar los ánimos de productores alineados en la Federación Agraria e incluso muchos “independientes” que se mostraron disconformes con el dialogismo de las demás entidades que nuclean a uno de los eslabones más débiles de la cadena productiva. La protesta activa “sumará más productores en la jornada de hoy” refirió a PRIMERA EDICIÓN el referente de la FA, Jorge Butiuk. La organización considera que hasta la fecha no se cumplieron los compromisos asumidos por las partes, por eso reclaman un nuevo laudo para que el precio llegue a los siete pesos por kilo de hoja verde (contemplando los nuevos costos laborales) y la modificación de la Ley del Inym, para permitir el acuerdo de precios por mayoría en vez de exigir la unanimidad.





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