Donar sangre es donar vida

 Señora Directora: Personalmente tuve la inmensa fortuna de haber nacido con el grupo sanguíneo 0+. Y a lo largo de mi vida pude donar sangre en más de quince ocasiones. No tengo ego ni me engrupo de nada, pero sí, estoy más que orgulloso de haber colaborado en recuperar la salud, para que una vida siga existiendo o para complicadas cirugías con mucha e inevitable pérdida de sangre, etc. En definitiva ser consciente de valorar el sentido de la vida, lo importante de estar con vida para bien.Somos muchos los que sabemos estar una sola vez en esta vida y de ser responsables no sólo de nuestras vidas, sino de las de cada familia y tener el necesario respeto hacia la vida del prójimo.No se imagina con cuanta alegría abandonaba los lugares donde había dejado mi sangre para bien del prójimo; lo tranquilo que estaba mi consciencia de ser solidario e intenté contagiar a muchas personas que estaban en condiciones de donar sangre que reconocieron que nunca analizaron que también podrían salvar vidas, porque siempre fuimos mayoría del pensar y actuar para bien.Los tiempos cambiaron y por muchas razones, no para bien. El criterio de una familia unida donde se dialogaba sobre temas cotidianos porque así se podían corregir actitudes, analizar errores, e insistir sobre la importancia de vivir y bien, y de ser solidario con situaciones críticas del prójimo, ha desaparecido. Hoy cada miembro de la familia tiene su celular y vive en su mundo, aun sentado en un Sanatorio, Clínicas u Hospital, frente al cartel que dice: “Dar sangre, es dar vida”.La otra cara de la moneda nos cuenta todos los días de un asesinato para robar una moto; uno o dos femicidios; de juvenil borracho al volante de un automóvil a alta velocidad, que atropellan, matan y huyen. Aquí no solo existe la irresponsabilidad, sino el desprecio por la vida ajena. Y para agregar a esta descomposición de la raza humana en el Parlamento donde se redactan leyes que poco contribuyen para corregirla.Tenemos entonces las dos caras de la moneda: lo a favor de la vida y el desprecio por la vida. Una gota de sangre tiene una sola cara que es la vida.