BOGOTÁ, Colombia (Agencias). Mientras Chile y Perú se enfocan en dar más brío a sus relaciones una vez finalizado el largo proceso judicial en la Corte de La Haya por sus límites marítimos, otros conflictos entre países latinoamericanos elevados al alto tribunal internacional siguen candentes, incluso después del fallo.Santiago será hoy escenario de una nueva cita del llamado 2+2, un mecanismo de consulta y concertación en el que participan los ministros de Exteriores y de Defensa de Chile y Perú, que será la primera después del fallo emitido en enero por la Corte Internacional de Justicia (CIJ).La sentencia, que responde a una demanda peruana, presentada en 2008, mantiene la frontera marítima actual hasta las 80 millas, pero la cambia desde ahí hasta las 200 millas a favor de Perú.Los dos Gobiernos se comprometieron a respetar y acatar el fallo y a implementarlo de forma gradual en el mismo clima armonioso y conciliador que ha reinado a lo largo de todo el proceso.La conducta de peruanos y chilenos no es lo habitual en estos casos. Hay países, como Estados Unidos, por ejemplo, que abandonaron la CIJ después de que emitiera un fallo que les era adverso.En 1986 la CIJ, en respuesta a una demanda de Nicaragua por el apoyo estadounidense a los “contras” que luchaban contra la revolución sandinista, estableció que Estados Unidos violaba con esas acciones el derecho internacional consuetudinario y anunció que debía pagar una multa por los daños millonarios causados, que nunca se concretó y cuyo importe ni siquiera se llegó a fijar.Ahora Nicaragua está de nuevo en la Corte como demandante y como demandado por litigios con Colombia y Costa Rica a propósito de los límites en el Caribe y en un río fronterizo, respectivamente.En noviembre de 2012 la CIJ estableció que la soberanía de una extensa área del Caribe hasta entonces controlada por Colombia le corresponde a Nicaragua, pero mantuvo bajo soberanía colombiana una serie de cayos, como había hecho previamente con las islas mayores del archipiélago (San Andrés, Providencia y Santa Catalina).El fallo cayó como una bomba en Colombia, cuyo Gobierno inició un proceso con vistas a abandonar la jurisdicción de la CIJ y declaró “inaplicable” lo fallado hasta que se celebre un tratado que proteja los derechos nacionales y se ajuste a la Constitución.Entre tanto, Nicaragua dobló la apuesta y presentó en septiembre de 2013 otra demanda para que la CIJ trace el “rumbo exacto” de la frontera entre ambos países en el Caribe más allá de las 200 millas.En noviembre el Gobierno nicaragüense sumó otra queja contra Colombia por incumplimiento del fallo de 2012. Este martes la CIJ anunció que Nicaragua tiene plazo hasta octubre para entregar el procedimiento escrito con los argumentos de su posición respecto a la frontera marítima a partir de las 200 millas náuticas y Colombia, hasta junio de 2015.Nicaragua además tiene planteada una demanda contra Costa Rica por presuntamente haber causado daños medioambientales al fronterizo río San Juan, de soberanía nicaragüense.A su vez está demandada ante el mismo tribunal por Costa Rica por invasión de territorio y daños medioambientales en una zona que ambos reclaman como propia.El canciller de Costa Rica, Enrique Castillo, acaba de advertir que antes de que la presidenta Laura Chinchilla deje el puesto, el 8 de mayo, su país presentará otra demanda contra Nicaragua ante la CIJ, en este caso bajo la acusación de ofertar bloques marinos ubicados en territorio costarricense.El Gobierno nicaragüense señaló ayer que la declaración de Castillo tiene “el propósito de intentar cerrar las puertas a cualquier diálogo” con el Gobierno costarricense que surja de la segunda vuelta electoral, prevista para abril.Esta semana Luis Guillermo Solís, del centro izquierdista Partido Acción Ciudadana (PAC), que se medirá en la segunda vuelta con Johnny Araya, del gobernante Partido Liberación Nacional (PLN), manifestó a Efe que es necesario “desnicaraguanizar” la política exterior de su país y se mostró dispuesto al diálogo.Otro conflicto enconado es la reclamación de Bolivia a Chile para que le entregue territorio con salida al Pacífico con soberanía.Después de décadas de reclamar y de infructuosas conversaciones, el Gobierno boliviano decidió en 2013 elevar el caso a la CIJ, en este caso con el fin de obligar a Chile a negociar una salida al enclaustramiento de Bolivia, condición en la que quedó al ser derrotado por la tropas chilenas en una guerra del siglo XIX.Aunque se pensó que el fallo en el caso Perú-Chile y la próxima llegada de Michelle Bachelet a la presidencia chilena podían hacer desistir a Bolivia de la demanda, el Gobierno de Evo Morales ha ratificado que seguirá adelante y que un posible diálogo bilateral no debe estar condicionado a la retirada. Otras disputas en la agenda geopolítica de los gobiernos de la región• Brasil-Uruguay: Mantienen una disputa por dos zonas: el Rincón de Artigas o el Rincão de Artigas, un área triangular de 237 km2 actualmente en manos brasileñas y un territorio fluvial en la desembocadura del río Uruguay que administrativamente está gestionado por Brasil, pero que es reclamado por Montevideo desde hace más de un siglo.• Bolivia-Brasil: Aquí el conflicto es por una pequeña isla fluvial en el Amazonas. Se trata de Isla Suárez, como es conocida en Bolivia, donde se la considera parte del departamento de Beni, o Ilha de Guajará-mirim, nombre para los brasileños que la incluyen en el territorio del estado de Rondônia. Tiene una superficie de apenas 2,58 kilómetros cuadrados, y hasta ahora no existe una definición formal de a quién pertenece.• Chile-Bolivia: Este último país mantiene su reclamo de tener acceso al Océano Pacífico desde 1879, cuando perdió su salida al mar en una guerra con su vecino. En abril de 2013 el presidente boliviano Evo Morales anunció la presentación de una demanda ante la Corte de La Haya para conseguir una salida soberana al mar para su nación.• Colombia-Venezuela: En este caso el litigio es por la delimitación marítima en las aguas del Golfo de Venezuela, en el área de la Guajira. Hubo muchos roces diplomáticos y en 1987 estuvo a punto de desatarse un conflicto armado, tras el ingreso de la corbeta colombiana Caldas en el territorio en disputa. A partir de la década de los 90 ambas partes acordaron congelar la discusión sobre el tema.• Venezuela-Guyana: La disputa territorial entre los vecinos caribeños nació en el siglo 19, cuando el Reino Unido estableció la fronter
a de su por entonces colonia Guyana Inglesa y, según Venezuela, incluyó dentro de sus límites al territorio de Esequibo. Actualmente esa porción de tierra sigue en manos guyanesas, pero Venezuela cuestiona la soberanía basándose en un acuerdo internacional de 1966.• Colombia-Nicaragua: Tal vez sea el enfrentamiento más reñido de toda la región, ya que ni siquiera fue resuelto con dos fallos de la Corte de La Haya. La zona en cuestión es el archipiélago caribeño de San Andrés y Providencia: en la sentencia de 2007 se determinó que las tres principales islas le pertenecían a Colombia, pero no estableció la soberanía de otros cinco islotes deshabitados ni la frontera marítima entre ambos países. Y en 2012 se reafirmó la propiedad colombiana de los islotes, a la vez que se trazó una frontera que reconoce como nicaragüenses al menos 75.000 kilómetros cuadrados de mar que los colombianos siempre consideraron suyos.• Nicaragua-Costa Rica: Desde 2010 se pelean por la soberanía de un islote fluvial de poco menos de 3 km2 de longitud ubicado en uno de los afluentes del río San Juan, cuya margen sur sirve de frontera entre ambos países. En noviembre de 2013 la Corte de La Haya le ordenó a Nicaragua frenar todas las labores de dragado y reparar el daño causado por las mismas, pero no resolvió el fondo del asunto: la soberanía del islote, según publica la cadena BBC Mundo.• Honduras-El Salvador: Los vecinos centroamericanos están enfrentados por la posesión de Isla Conejo, un islote de medio kilómetro de extensión en el Golfo de Fonseca. Desde 1983 la zona está ocupada por soldados hondureños, que llegaron luego que el destacamento militar de El Salvador regresara al continente. En noviembre pasado comenzó una batalla diplomática ante la ONU.• Guatemala-Belice: Desde 1859 Guatemala reclama como propia una extensión de 12.700 kilómetros cuadrados dentro del país vecino, un área que representa casi la mitad del territorio beliceño. En 2000 ambas naciones aceptaron a la Organización de Estados Americanos (OEA) como mediador, pero tras un fallido referéndum guatemalteco en 2013 los gobiernos acaban de restablecer las negociaciones este año.• Al margen, Argentina-Reino Unido (Islas Malvinas-Falklands): El país sudamericano le reclama al europeo por la soberanía del archipiélago, ocupado por los británicos desde 1833. En 1982 se produjo una guerra entre ambas naciones que terminó con la victoria de los ingleses, y desde ese momento el país presidido por Cristina Fernández Kirchner comenzó sus reclamos por la vía diplomática.




Discussion about this post