PUERTO IGUAZÚ. Una carpintería perteneciente a Cáritas quedó prácticamente reducida a cenizas, en tanto que los investigadores no descartan que el siniestro fuera provocado por manos hasta ahora anónimas. El fuego se desató cerca de las 22 del pasado sábado, en un predio privado ubicado en la intersección de las calles José Hernández y Miguel Cané de Puerto Iguazú. Las autoridades estiman que el hecho damnificó a dicha organización de beneficencia por unos 500 mil pesos. La denuncia por el presunto acto de vandalismo fue radicada por el sacerdote Raimundo Lencina, presidente de la Diócesis de Iguazú, en representación de Caritas, como así también por un hombre de 49 años, en carácter de propietario del inmueble. En la escena del hecho estuvo presente personal de la comisaria Cuarta, Comando Radioeléctrico y bomberos voluntarios de esa ciudad. Por si fuera poco, un grupo de vándalos dañó la luneta de uno de los patrulleros que acudió al lugar cuando se produjo el voraz incendio. Personal técnico de la División Bomberos de Puerto Esperanza realizó las pericias en el lugar. Se instruyen actuaciones de rigor con intervención del Juzgado de Instrucción con asiento en Puerto Iguazú.
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